La tecnología ha transformado nuestra vida de muchas formas: la manera en que trabajamos, vivimos y nos relacionamos. Ha permitido avanzar en educación, el entretenimiento, la comunicación y la salud. Estos avances tienen un gran potencial y beneficios. Sin embargo, también traen implicaciones para la salud no solo desde el punto de vista psicológico sino también físico.
Pasar mucho tiempo pegado a una pantalla y enganchado a un teclado, un ratón o un mando, sea cual sea, puede comportar un aumento de los problemas físicos. El pulgar para enviar mensajes de texto en el móvil, el codo para hacer selfies o el cuello cuando estamos frente al ordenador son algunas de las partes del cuerpo que más lesiones musculoesqueléticas sufren debido a un uso excesivo de la tecnología.
Los principales problemas que nos ha traído el “tecno-sedentarismo” podrían resumirse con lo que se conoce como lesión por esfuerzo repetitivo (RSI, en sus siglas inglesas). Este término se usa para describir el dolor que aparece en los músculos, nervios y tendones causado por el movimiento repetitivo y el uso excesivo en zonas como antebrazos y codos, muñecas y manos y cuello y hombros. En la mayoría de los casos suele aparecer, además de dolor, hormigueo, entumecimiento, hinchazón o pérdida de flexibilidad de la zona afectada.
1. Síndrome del túnel carpiano
Se trata de un problema común que afecta la función normal de la mano y está provocado por la compresión del nervio mediano en la muñeca. Aparece sobre todo cuando este nervio se inflama al someterlo a movimientos repetitivos, como escribir en un teclado o enviar mensajes de texto. Suele aparecer dolor, sensación de ardor en los dedos medio e índice o entumecimiento del pulgar y los dedos.
2. Hombro de ratón
Este término se ha usado para describir un problema específico derivado del uso excesivo del ordenador. Se calcula que aproximadamente el 75% de los trabajos dependen ya de un ordenador. Esto contribuye en buena manera a que aparezcan molestias en el cuello y los hombros en personas que pasan muchas horas frente al ordenador.
El dolor se describe en la mayoría de los casos como una especie de ardor que se presenta en un lado del cuello y que se extiende al hombro. Se asocia con el uso repetido o prolongado del ratón en posición no ergonómica.
3. Dolor cervical
La forma cómo usamos los dispositivos móviles y los ordenadores a menudo no es la adecuada. Una postura incorrecta puede, con el tiempo, provocar problemas musculoesqueléticos, sobre todo porque solemos adoptar una postura hacia abajo y adelante, lo que significa que estamos encorvados hacia adelante y mirando hacia abajo. Esto ejerce una presión innecesaria sobre el cuello y la columna.
4. Lesiones en pulgares
El uso excesivo de los dispositivos móviles puede provocar lesiones por esfuerzo repetitivo en los dedos y las muñecas. Según un estudio hecho por Nielsen, la empresa de análisis de datos, un adolescente puede llegar a enviar un promedio de 3.339 mensajes de texto al mes.
Otro estudio, realizado por Ofcom, advierte que el 77% de los adolescentes de entre 12 y 15 años pasan el tiempo con los videojuegos durante unas doce horas a la semana. Si sumamos estos dos datos, el resultado es mucho trabajo para algo tan pequeño como el dedo pulgar.
5. ‘Wiitis’ o ‘Nintendinitis’
Aunque los videojuegos en los que el jugador tiene estar físicamente activo son opciones más saludables que las que pueden hacerse sentado, también pueden causar cierto tipo de lesiones. Algunas de estas incluyen problemas en la cabeza o dislocaciones de hombros.
En 2014, el British Medical Journal hizo una recopilación de 38 artículos sobre las enfermedades y traumas que pueden provocar los videojuegos que incluyen la “wiitis” y la “nintendinitis”. El juego excesivo con controladores tradicionales se asocia con tendinitis del pulgar, ulceración palmar, problemas musculoesqueléticos y varios traumatismos.
Los expertos reconocen, sin embargo, que la mayoría de los problemas descritos son leves y, teniendo en cuenta la cantidad de juegos vendidos, la prevalencia es baja. Para evitar problemas recomiendan tomarse descansos frecuentes, no mover el mando demasiado fuerte y tener cuidado con el lugar donde se juega.
El hecho de que muchas lesiones sean el resultado directo de ciertos trabajos puede hacer que sea difícil evitarlas. En algunos casos, la prevención es tan simple como:
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