Llegan estas fechas festivas y nos morimos por tomar una buena torrija. Ese pan duro que enternecemos remojándolo en leche y aromatizamos con canela, y que a veces nos comemos con cierto sentimiento de culpa. Nos toca ser claros: no vale hablar de una torrija más saludable, con menos azúcar o light, a la torrija hay que llegar dejando los peros en casa. Si decidimos disfrutar de este manjar, mejor hacerlo sin remordimientos –eso sí, con moderación–.
Aunque existen versiones veganas en las que se cambia el huevo por una mezcla de harina de garbanzos y las 'light' que se tuestan en el microondas, la receta tradicional es la que tenemos en la memoria y que es de sobra conocida: un buen pan de miga prieta (preferiblemente de masa madre y tradicional, no estilo brioche o de molde) bien remojado en leche aromatizada con canela y azúcar, pasado por huevo y frito en abundante aceite, ya sea de oliva suave o de girasol, según el gusto. A partir de aquí, la imaginación al poder.
La mala noticia es que nuestro tiempo es limitado y esta es una receta ciertamente entretenida y que necesita técnica culinaria para que no nos queden secas, se nos deshagan en el remojado o no resulten demasiado aceitosas; la buena es que hay supermercados que nos dan la torrija básica ya hecha.
No os voy a decir que este tradicional dulce de Semana Santa adquirido en un establecimiento cuando vamos a comprar la lechuga o los yogures sea mejor que la hecha en casa porque sería mentir, pero con un poco de voluntad e imaginación podemos hacer de estas torrijas del súper arte culinario. Ideas no nos faltan.
Torrijas de Mercadona, cuatro unidades (6€)
Esta torrija que se presenta congelada es la mejor del mercado según el comparador de la OCU. Elaborada con leche, pan, huevos y azúcar, tiene en su contra que presenta varios conservantes y colorantes, pero a favor que al presentarse congeladas pueden comprarse y mantenerse varios días en el congelador hasta su consumo.
El resultado, tras descongelarla en el frigorífico durante cuatro horas, es un producto que resulta con una jugosidad bastante conseguida, ya que uno de los problemas de estos productos preparados es que se quedan secos.
Si le damos un mínimo toque de microondas para quitarle el frío extremo y la rebozamos en la clásica mezcla de azúcar y canela, o la regamos brevemente con un almíbar ligero de miel, además de acompañarla con una vaso de leche o un café, nos queda una merienda de primera.
El Corte Inglés, dos unidades (6€)
La de El Corte Inglés es una torrija bastante más cara que la de Mercadona, pero no lleva en su composición aditivos como conservantes. Se elabora también con leche, pan, azúcar, huevo y aceite de girasol, y resulta una opción también cercana a las que se hacen en casa.
Para darle un toque casero y presentarla en la mesa como si acabáramos de hacerla, puede dar buen resultado elaborar una almíbar flojo con medio litro de agua y 250 gramos de azúcar que debemos cocer durante 10 minutos con unas ramas de canela y cáscara de cítricos. Pasamos cada torrija ya descongelada unos segundos por el almíbar caliente y las servimos con algo de este preciado líquido dulce por encima, ya templadas.
Ahorramas, tres unidades (5,99€)
La de Ahorramas es una torrija al estilo tradicional. Elaborada con la clásica barra de pan, leche, azúcar, crema de huevo, canela y aceite de girasol, aunque también contiene conservantes y colorantes.
Quizá resulte algo seca, por eso, para darle un poco de jugosidad, podemos hacer como en algunas elaboraciones caseras: servirlas sumergidas en leche que se ha cocido previamente con azúcar y abundante canela. Las cubrimos con esta mezcla láctea, las dejamos empapar bien y se presentan a la mesa ya frías.
Carrefour, tres unidades (5,5€)
La torrija de Carrefour está bastante conseguida en sabor y jugosidad, y tienen un precio intermedio por lo que es una buena opción. Se elabora, como casi todas, con leche entera, pan, crema de huevo, aceite de girasol y azúcar; aunque también incorpora conservantes y colorantes en su composición.
Para tunearla cuando tenemos poco tiempo, está muy bien espolvorear bastante azúcar y caramelizarla con un soplete de cocina. Con esto conseguimos una capa crujiente y cierto toque templado que mejora el conjunto.
Sabores de Tradición Torrijas, de Lidl (dos unidades, 2,99€)
Lidl también ha vuelto a llevar a sus establecimientos esta Semana Santa unas torrijas ya elaboradas bajo la marca Sabores de Tradición a un precio interesante en formato ultracongelado. En este caso, no es la clásica torrija casera, sino elaborada con pan de brioche, además de huevo, azúcar y licor; aunque también aditivos para su conservación.
En este caso, presentadas con algunas frutas como las frambuesas por encima, pueden ser buen desayuno o estos días de fiesta.
Casa Eceiza, dos unidades (3,95€)
La torrija de Casa Eceiza que se vende en Alcampo y en Eroski es bastante agradable, aunque se aleja de las torrijas tradicionales y se acerca más a las que están tan de moda en los restaurantes: hechas con pan de brioche, más cercanas a una tostada francesa (este dulce parecido a la torrija pero algo más ligero). Además del brioche, lleva algo de licor, nata, leche, azúcar, y sorprende que no está frita en aceite.
A esta torrija que quizá no sea tan tradicional sino algo más gastronómica, le iría bien servirla sobre una natilla o crema inglesa clarita, una opción que también podemos comprar ya elaborada. También es una idea interesante derretir algo de chocolate, preferiblemente negro, con un golpe de microondas y, una vez conseguido, ponerle algunos hilos por encima sin excederse. Con cualquiera de las dos opciones te quedará un postre muy logrado.
Con estos trucos podemos mejorar casi cualquiera de las torrijas que encontramos en los supermercados, aunque también nos queda la opción de hacerlas en casa, ahorrándonos los conservantes y los colorantes y, pese al precio que tienen los huevos y si optamos por freírlas en aceite de girasol, nos saldrán más económicas.
Si tienes problemas con el gluten, en los supermercados escasean las opciones, aunque sí hay algunas buenas alternativas en pastelerías. En Madrid destaca la Pastelería La Oriental, que tiene varios locales en la capital y que en 2023 y 2024 ha logrado el premio de la Asociación de Empresarios Artesanos del sector Pastelería de Madrid en la categoría Sin Gluten. Su propuesta es una torrija sin gluten, sin lactosa y sin proteína de leche de vaca; el resto de la receta, es completamente tradicional.