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La segunda vuelta

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En diferentes medios de comunicación se ha informado de que Alberto Núñez Feijóo, en una reciente reunión a puerta cerrada con dirigentes del grupo popular europeo, había expresado su preocupación por la reforma de las pensiones aprobada por el Gobierno presidido por Pedro Sánchez y las consecuencias que tal reforma podría tener para él, cuando accediera a la presidencia del Gobierno tras las próximas elecciones. La gestión de las pensiones, pactada por el Gobierno con los sindicatos, pero de la que se ausentó la CEOE, podría suponer un quebradero de cabeza para un futuro gobierno presidido por Núñez Feijóo.

La información no ha sido desmentida por el presidente del PP, lo que permite considerarla como información “veraz”. No siempre el que calla otorga, pero hay ocasiones en las que es así. Y esta parece ser un claro ejemplo. El que calla ante una información como esta dice mucho, de la misma manera que dice mucho la abstención en una votación como la de la moción de censura presentada por 51 diputados de Vox con Ramón Tamames como candidato a la presidencia del Gobierno. El mensaje que el PP envía a la sociedad española con el silencio sobre la reunión del PP europeo y con la abstención en la moción de censura es de una claridad meridiana.

Afortunadamente, este jueves tendrá lugar en el Congreso de los Diputados el debate previo a la convalidación del Real Decreto-ley sobre la reforma de las pensiones. En España, a diferencia de lo que ocurre en Francia, la norma gubernamental tiene que ser convalidada por el Congreso de los Diputados por mayoría absoluta. Si no lo es, desaparece del ordenamiento jurídico. En Francia tiene que ser rechazada mediante la aprobación de una moción de censura. La Constitución española impone al Gobierno la tarea de conseguir articular una mayoría absoluta en el Congreso. La Constitución francesa se la impone a la oposición. 

El jueves va a tener lugar en el Congreso de los Diputados un auténtico debate sobre la reforma de las pensiones, en el que cada grupo parlamentario podrá dejar negro sobre blanco cuáles son los argumentos que tiene para votar a favor o en contra de la convalidación de la norma gubernamental. Nadie puede ponerse de perfil.  

Aunque Alberto Núñez Feijóo no puede participar en el debate, no cabe la menor duda de que la opinión que exprese la portavoz del grupo parlamentario popular, Cuca Gamarra, será la del presidente del partido. Así como también parece fuera de duda que también lo será el voto favorable o contrario a la convalidación de los parlamentarios del PP.

El jueves, por tanto, sabremos qué es lo que le dijo Alberto Núñez Feijóo a sus colegas europeos o, lo que es lo mismo, qué credibilidad tienen las palabras del presidente del PP cuando habla en Europa y cuando lo hace en España. Y no sobre un tema cualquiera, sino sobre un tema que ocupa un lugar central en el debate político-económico en toda la Unión Europea. 

El debate del jueves puede ser considerado como una segunda vuelta del debate de la reciente moción de censura sin el desvío del foco hacia la bancada de Vox y hacia su incalificable candidato. El jueves se examina el Gobierno, pero también el PP y todos los demás partidos. La sociedad española podrá saber de primera mano cómo fundamenta cada parte su posición y qué decisión adopta. En definitiva, cuáles son las alternativas que se ofertan al país. 

En diferentes medios de comunicación se ha informado de que Alberto Núñez Feijóo, en una reciente reunión a puerta cerrada con dirigentes del grupo popular europeo, había expresado su preocupación por la reforma de las pensiones aprobada por el Gobierno presidido por Pedro Sánchez y las consecuencias que tal reforma podría tener para él, cuando accediera a la presidencia del Gobierno tras las próximas elecciones. La gestión de las pensiones, pactada por el Gobierno con los sindicatos, pero de la que se ausentó la CEOE, podría suponer un quebradero de cabeza para un futuro gobierno presidido por Núñez Feijóo.

La información no ha sido desmentida por el presidente del PP, lo que permite considerarla como información “veraz”. No siempre el que calla otorga, pero hay ocasiones en las que es así. Y esta parece ser un claro ejemplo. El que calla ante una información como esta dice mucho, de la misma manera que dice mucho la abstención en una votación como la de la moción de censura presentada por 51 diputados de Vox con Ramón Tamames como candidato a la presidencia del Gobierno. El mensaje que el PP envía a la sociedad española con el silencio sobre la reunión del PP europeo y con la abstención en la moción de censura es de una claridad meridiana.