Ángel Alonso Giménez
Madrid, 21 nov (EFE).- ‘Borgo’ es una película basada en un doble asesinato real que ocurrió en la isla de Córcega en 2017, pero su director, el francés Stéphane Demoustier, prefirió contar en el filme, que se estrena este viernes en España, la historia de un personaje relacionado indirectamente con la tragedia porque, según cuenta, “el desvío de una vida puede depender de cosas muy pequeñas”.
Melissa es funcionaria de prisiones en Ajaccio, la capital corsa, a donde se ha desplazado con su pareja y sus hijos para empezar una nueva vida. En la cárcel conoce a un preso aparentemente inofensivo, quien, tras salir de prisión, le pedirá un favor.
Parece un favor sin más, algo inapreciable, pero terminará cambiando la vida de Melissa radicalmente.
Haifsa Herzi, una actriz francesa de origen tunecino y argelino, encarna a una mujer “fuerte” en su trabajo, en donde logra la autoridad ante presos rudos y peligrosos, y “frágil” en su esfera más familiar; su trabajo sostiene e impulsa el largometraje.
“Haifsa aporta dulzura, fragilidad y fortaleza”, afirma el director, quien reconoce que fue a buscar a Herzi para que se metiera bajo la piel del personaje central de 'Borgo' porque es una actriz que, resalta, aúna todas las cualidades que necesitaba.
Mafias, clanes y policías
Melissa tiene problemas de convivencia vecinal, tensión con su pareja por el desempleo de él, algunas dificultades de adaptación, y tiene que lidiar día tras día con las protestas y reclamaciones de los presos.
Problemas en su privacidad y en su trabajo, pero problemas que quedan en poca cosa a raíz de una decisión que quizá no podía evitar.
'Borgo' es una película, como indica su director, sobre “una sucesión de decisiones que provocan que a Melissa le cambie la vida”. “Me interesaba explorar esa desviación, derivada de una manipulación”, añade.
Al mismo tiempo, esta producción francesa es la investigación de un asesinato. Hay mafias, hay clanes, una prisión, violencia contenida y policías.
“Hacer una película sobre una cárcel, en Córcega, lleva a una dimensión policíaca. Esa violencia existe. Hablando con mucha gente entendí que es una violencia que circula de manera subterránea. De hecho, Melissa entra en ella a través de un chico de rostro angelical que, sin embargo, es implacable”, explica Demoustier.
A este cineasta galo, quien en su país alcanzó renombre gracias a 'La chica del brazalete', le gusta la contraposición entre lo que se espera y lo que se ve.
Él mismo lo disfrutó mientras escribía la película, según sus palabras, porque cuando construía los personajes pensó en alguien mayor para encarnar al exrecluso que complica la vida de Melissa, pero en el casting encontró a un joven y dijo 'voilá': se trata de Louis Memmi.
Ficción, en su mayoría
Demoustier no investigó el doble asesinato: sale en 'Borgo', se reconstruye, pero como punto de partida de otra trama.
Esto no evitó que el director sintiera el temor de que la película molestara a una sociedad, la corsa, que quedó conmocionada tras el homicidio.
No ocurrió tal cosa, asegura el cineasta, porque al final el público distinguió que es ficción lo que se cuenta y que el hecho que activa la trama es justo el que apareció en la prensa. “Quería mantener cierta distancia y limitarme a contar la historia de una funcionaria de prisiones a la que manipula la mafia”, redunda Demoustier.