Al tiempo que agota las entradas de todos los conciertos de su gira, Taylor Swift se ha propuesto un nuevo asalto, llenar las salas de cine. La cantante, que continúa viajando por el mundo con su espectáculo, añade a partir de este viernes 13 de octubre un nuevo tentáculo a su nutrido –y máquina de hacer dinero– universo: el lanzamiento mundial de su documental The Eras Tour.
Tal es la expectativa sobre lo que se espera que arrase en taquilla, que hasta ha habido películas que han modificado su fecha de estreno para evitar coincidir con el largometraje de la estrella del pop. Entre ellas, El exorcista: Creyente, que anticipó su puesta de largo a la semana pasada.
La artista hizo público el día de estreno en Estados Unidos, Canadá y México el 1 de septiembre y la locura se desató de inmediato. Las salas vendieron de un plumazo todas las entradas. Por ese motivo Blumhouse, productora de la última cinta de la trilogía de La noche de Halloween, optó por mover su lanzamiento al 6 de octubre.
“Mira lo que me has hecho hacer”, escribió en redes sociales Jason Blum, dueño de la compañía, junto al hashtag #TaylorWins (Taylor gana). Sus pasos los siguieron What happens later, que protagonizan Meg Ryan y David Duchovny y se verá a partir del 3 de noviembre; y la comedia de John Cena Freelance, trasladada al 20 de octubre.
El 26 de septiembre se supo que Taylor Swift: The Eras Tour llegaría a todo el mundo este viernes, incluidos los países en los que todavía no ha actuado, como España. Sus posibles víctimas en nuestro país han contado con la 'suerte' de que su estreno coincida con la celebración del Día del Pilar, una festividad que ha provocado que el resto de las películas hayan desembarcado en salas el miércoles 11 de octubre, a excepción del documental.
Es decir, han contado con dos jornadas en taquilla 'libres' del show de la cantante. El thriller Sound of Freedom, la comedia española Me he hecho viral, la cinta infantil La patrulla canina: La superpelícula, el documental La vida de Brianeitor y el drama Al otro lado del río y entre los árboles han sido los títulos afectados por el cambio en la cartelera.
Un documental 'fantasma'
La película sobre la intérprete de Love story ha escrito su propio capítulo dentro del huracán Swift antes de que ningún espectador –ni la prensa– haya podido verla. Según los datos que la cadena AMC proporcionó el pasado 4 de octubre, el filme ya había vendido 100 millones de dólares en las entradas que coparán las 8.500 salas de los más de 100 países en los que va a proyectarse. Y todavía faltaban nueve días hasta su llegada, por lo que es probable que la cifra haya aumentado, considerablemente.
Según el medio especializado Puck, el filme costó entre 10 y 20 millones de dólares, por lo que su primer fin de semana le serviría para cuadriplicar su presupuesto. Para contar con una perspectiva más amplia sobre lo que estas cifras implican, Barbie, que ostenta el récord de mejor debut del año, acumuló más de 300 millones de dólares durante sus tres primeros días en salas en todo el mundo. Oppenheimer, con quien compartió fecha de estreno, reunió 174 millones.
Ahora bien, ¿en qué consiste exactamente The Eras Tour? Nos encantaría poder informar y valorar el contenido del documental, pero se nos ha negado verlo antes del estreno. Ningún periodista ha tenido la oportunidad de acceder a un pase previo, una práctica nada habitual por parte de distribuidoras y distribuidoras. Lo único que se sabe es que abordará la gira con la que comparte título y que Sam Wrench (Billie Eilish: En vivo desde el O2, Lizzo en concierto) es su director.
Este secretismo –más allá de perjudicar el trabajo de los medios–, se ha convertido en otra baza con la que seguir generando expectativas y tratar de alcanzar a todavía más público, vender tickets y sacar mayor entabilidad al largometraje que la artista ha producido a través de su propia compañía, Taylor Swift Productions, responsable de varios de sus videoclips, y otros dos documentales: Taylor Swift: reputation Stadium Tour (2018) y Folklore: The Long Pond Studio Sessions (2020).
Su despliegue de títulos de este género evidencian que ha encontrado en este formato otro filón para hacer caja, pues este es el cuarto documental –aunque el primero en llegar a las salas y no directamente a plataforma–. A los dos citados le precedieron Miss Americana (2020).
Swift ha fijado ahora hasta los precios de las entradas, que en España, donde se ha establecido un precio único, cuestan 13,13 euros. En Estados Unidos este es el valor del ticket reducido, mientras que por el general hay que pagar 19,89 dólares. Todos los números hacen referencia a su fecha de nacimiento: el 13 de diciembre de 1989.
Su estrategia no ha pasado desapercibida, ya que este mismo mes Beyoncé ha decidido seguir sus pasos poniendo en marcha un largometraje sobre su tour Renaissance. El filme, que ya tiene tráiler, incluirá imágenes tanto de la grabación del disco como de sus conciertos. A los 461,3 millones de dólares que acumuló durante la gira podrá sumar los que recaude con la película, que llegará a los cines de Estados Unidos, Canadá y México el próximo 1 de diciembre.
Una gira de más de 1.000 millones de dólares de beneficio
La gira de Swift está siendo todo un éxito. Así lo demostró la propia venta de entradas para sus conciertos, un auténtico drama para fans que llegaron a afirmar que la dificultad para hacerse con una implicó trazar estrategias dignas del Risk. Sus shows registraron una demanda sin precedentes desde que se pusieran a la venta sus fechas en Estados Unidos el pasado mes de noviembre, provocando un colapso histórico en el sistema de Ticketmaster.
Los 'swifties', nombre con el que son calificados sus seguidores, conforman un ejército global que está llenando, uno a uno, cada recinto que acoge desde marzo The Eras Tour, todavía en Estados Unidos. Y ya está asegurado que lo seguirá haciendo hasta su último directo, que acogerá el estadio de Wembley en Londres en agosto de 2024. Antes, el 30 de mayo, pasará por Madrid en su única parada en España. Todo ello con unas consecuencias estratosféricas para sus bolsillos. Y también los de su equipo, ya que decidió repartir 100.000 dólares extra a cada trabajador de su gira.
Su huella se está dejando ver hasta en la economía de Estados Unidos. Un informe de la Reserva Federal de Estados Unidos aseguró que está impactando en cada una de las ciudades que visita. Se estima que el global de la gira supere los 1.000 millones de dólares.
El cine, en su punto de mira
A estos habrá que sumarle la recaudación en taquilla de su documental que, a su vez, ni ha sido ni será la única incursión de Swift en el cine. La cantante dirigió el año pasado el cortometraje All Too Well, que sirvió de videoclip de su canción homónima, y que no logró pasar la criba de los Oscar. Y no se puede decir que no le puso empeño para hacerse con la estatuilla.
La cantante llegó a contratar a una agencia especializada en campañas para la temporada de premios con la que echó toda la carne en el asador. Pero no fue suficiente. Eso sí, la Academia de Hollywood la invitó el pasado mes de junio a unirse a la institución, de tal forma que podrá votar en la próxima entrega de los galardones.
No tiene pinta de que vaya a desistir en su empeño. A su debut tras las cámaras y en el guion de All Too Well, Swift ya está trabajando en la que será su primera película. La cantante firmó un contrato con el estudio Searchlight Pictures. Cerca de un año después siguen sin saberse muchos más detalles del proyecto, del que no se anunció ni el nombre de los protagonistas ni su argumento, más allá de que el guion iba a escribirlo la propia estadounidense.
Si algo queda claro es que Swift no parece dispuesta a renunciar a ningún formato con el que seguir dejando patente su versatilidad y talento y, de paso, seguir ampliando la maquinaria con la que sacarle rendimiento.