“Vestido de novia”, película cubana dirigida por Marilyn Soraya, que compite en la sección Territorio Latinoamericano del Festival de Málaga, propone un relato situado en el Periodo Especial de la isla en el que aborda la transexualidad y hace una denuncia del machismo y la doble moral.
Soraya ha explicado a Efe que el contexto “es protagonista” de la película y añade que situó el relato en 1994, “en puro Periodo Especial, cuando se estrenó 'Fresa y Chocolate'”, el drama cubano sobre la homosexualidad que estuvo nominada a los premios Óscar como mejor película extranjera.
El filme es un relato de ficción inspirado en la historia real de Mavi Susel, la primera persona que se hizo una operación de cambio de sexo en Cuba, en 1988, sobre la que la directora realizó el documental “En el cuerpo equivocado”.
“Susel me inspiró y le hice un documental, pero tenía una deuda con ella, me abrió las puertas de su corazón y de su casa; además es un regalo que le hago a mis hijos”, agrega.
La directora señala que la película denuncia ese contexto “hegemónico, machista, patriarcal y la doble moral que nos come”, porque todos los conflictos de la película surgen “a raíz de un pene que ya no está, que la persona ya no tiene: mi filme va más allá de los genitales”.
“El machismo es una herencia cultural de nuestros pueblos, el peor defecto que ha marcado a nuestras sociedades; no importa el régimen, de izquierdas o de derechas (...) Cuba es machista, y hay una doble moral”, detalla.
La película recibió el Premio de Público en el Festival Internacional de Cine de la Habana en 2014, y la directora ha detallado que durante la proyección “pasaron cosas geniales, ya que la aceptación fue masiva”.
“La gente en Cuba, esos mismos machistas, esos homofóbicos, aplaudió de manera masiva. Nuestras salas son de mil y pico espectadores, y que se llenen, que se pase dos veces y quede gente afuera es una experiencia, un termómetro para decir que esta película funciona”, menciona.
Por su lado, la protagonista de la película, Laura de la Uz, ha explicado que en Cuba ha pasado algo “muy bonito” con la película, ya que ha ayudado a que las personas “entiendan, comprendan y se acerquen” a estos temas de género. Y añade que a ella “constantemente” la paran en la calle para agradecerle la película.
“Hay una anécdota de una maestra de música de mi hijo (...) que me dijo que quería agradecerme la película, porque siempre había tenido prejuicios frente a todo lo diferente”, agrega.
La actriz, que comparte cartel con Jorge Perugorría, Luis Alberto García e Isabel Santos, ha añadido que la película se inspira en una persona que “durante 63 años había vivido como un hombre y, cuando se jubiló, decidió operarse y decidir vivir como lo que sentía que era, una mujer”.