Hace casi dos años, el servicio de aduanas francés interceptó un Picasso valorado en más de 25 millones de euros perteneciente a Jaime Botín, justo cuando este lo intentaba sacar de contrabando fuera del país. El cuadro, declarado como “inexportable” por las autoridades españolas, se dirigía a Suiza.
Ahora, la Fiscalía ha pedido cuatro años de prisión para el expresidente de Bankinter por supuesto delito de contrabando de bienes culturales. Cabeza de mujer joven fue pintado por Pablo Picasso en 1906 e intervenido en Francia en 2015.
El Ministerio Público ha presentado en el Juzgado de Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) un escrito de acusación en el que solicita dicha pena y que se le condene además a Jaime Botín a una multa de 100 millones de euros. En caso de impago pide que se le impongan otros seis meses de cárcel.
La obra volverá al dominio público español en aplicación de lo previsto en la Ley de Patrimonio Histórico. De hecho, el 10 de agosto de 2015 la autoridad judicial de Bastia (Córcega, Francia) autorizó la entrega de la obra a agentes de la Guardia Civil desplazados desde España, que la depositaron al día siguiente en el Museo Nacional Reina Sofía de Madrid.
Además, la Fiscalía de Madrid se querelló el martes contra Jaime Botín y otras tres personas por haber defraudado presuntamente un millón de euros mediante la deslocalización “artificiosa” de un avión privado en Portugal, donde no existen impuestos para este tipo de actividades.
No existe “una obra semejante” en España
En el escrito de la Fiscalía se relata que Jaime Botín cometió los hechos siendo propietario de la obra original del artista malagueño, que poseía en su domicilio de la urbanización de Somosaguas, en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.
El caso tiene su origen en la petición que realizó el 13 de diciembre de 2012 la firma de subastas Christie's Ibérica a la secretaría de Estado de Cultura española para su exportación definitiva a Londres. La Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español acordó pocos días después denegarle la autorización al “no existir una obra semejante en el territorio español”.
El organismo argumentó que era “una de las pocas realizadas por su autor dentro del periodo Gósol, etapa en la que Picasso se ve claramente influenciado por la plástica del arte ibérico y los hallazgos llevados a cabo en ese momento influirán decisivamente, no solo en el cubismo, sino también en la evolución posterior de la pintura del siglo XX”.
Siguiendo este dictamen el director general de Bellas Artes denegó el 19 de diciembre de 2012 la solicitud y el Ministerio de Cultura acordó, nueve días después, que la obra no se podía exportar como medida cautelar hasta su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).
Sacando el Picasso en un exclusivo yate
La Fiscalía destaca que, “pese a ser plenamente consciente de la prohibición, el acusado trasladó el cuadro a un yate de su propiedad atracado en el puerto de Valencia para sacarlo de España y dio instrucciones a su capitán para que lo ocultara”. Ese yate era el Alix, una exclusiva propiedad a bordo de una sociedad pantalla con la que el hermano del fallecido Emilio Botín minimiza el pago de impuestos por el uso y disfrute de estas embarcaciones.
El Servicio Fiscal de la Guardia Civil realizó el 10 de junio de 2015 una inspección en el yate y requirió al capitán una declaración de los bienes que estaban a bordo y, “siguiendo las instrucciones de su patrón, no incluyó en el listado la obra de arte, aunque sí otras”.
En julio de ese año el barco atracó en el puerto de Calvi (Córcega, Francia) con el cuadro a bordo mientras Jaime Botín contrató con una empresa de transporte aéreo la reserva de un vuelo para el día 31 de dicho mes para trasladarse con el cuadro a Ginebra (Suiza).
“Los servicios aduaneros franceses, al tener conocimiento de que el acusado estaba tramitando el permiso de salida del vuelo con un cuadro, ordenaron la pertinente inspección que se llevó a cabo el 30 de julio. Localizaron la obra embalada en la cabina del comandante y ante la falta de la preceptiva autorización para su salida de España procedieron a su intervención”, concluye la Fiscalía.