Las mujeres cineastas han obtenido un total de 30 nominaciones a los Premios Goya, frente a las 83 de sus compañeros masculinos, es decir, el 26,8 % del total, según el recuento efectuado por la Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales (CIMA).
En un comunicado difundido anoche, la asociación considera este dato “alarmante” y destaca que en ocho categorías no hay ni una sola mujer: dirección de fotografía, música original, efectos especiales, dirección artística, sonido, película de animación, corto de ficción y corto de animación.
Las excepciones son diseño de vestuario, donde el porcentaje es del 75% y mejor película iberoamericana, donde roza el 70%. CIMA destaca también que en la categoría de maquillaje y peluquería, donde las mujeres suelen estar más presentes, el porcentaje ha descendido por debajo del 50%.
Las nominaciones a los Goya se dieron a conocer ayer. De las cinco finalistas a mejor película, dos están dirigidas por mujeres -La librería, de Isabel Coixet, y Verano 1993, de Carla Simón- y tres por hombres -Handia, de Jon Garaño y Aitor Arregi, El autor, de Manuel Martín Cuenca, y Verónica, de Paco Plaza-.
Todos ellos compiten por el Goya a la mejor dirección, salvo Carla Simón, que lo hace en dirección novel. En ambas categorías la cuota femenina es del 2 %, es decir, una de cuatro representantes.
En guion original también hay una sola mujer, de nuevo Simón, mientras que en adaptado sube el 37%, con Isabel Coixet y Coral Cruz, coautora de la adaptación de “Incierta gloria”.
En montaje la cuota es del 12,5% y en dirección de producción del 25%, en ambos casos gracias a las nominaciones de Verano 1993.
Ayer mismo el secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo, anunció en el Congreso de los Diputados que el Gobierno tiene previsto incrementar los puntos de baremo que dan acceso a las ayudas a las mujeres cineastas para combatir “las desigualdades” que han detectado en el sistema de producción.