A partir de mañana, algunos grupos sin mucho impacto mediático en la industrial musical conseguirán su momento dulce. La razón: Los Premios de la Música Independiente, entregados por la UFI -Unión Fonográfica Independiente- y a los que aspiran más de un centenar de artistas. El Círculo de Bellas Artes será la sede oficial y los Mongoles los grandes maestros de ceremonias, una cita divertida y necesaria para evitar los grandes monopolios de este mundillo.
Para los despistados, estos galardones se vienen entregando desde 2009, pero en su quinta edición de 2013 consiguieron unas cifras de seguimiento arrolladoras. Hace un año, estos premios rescataron de las sombras a artistas que ahora son todo un referente del género, como Izal. El grupo de treinteañeros, que creció gracias al directo y los festivales, pudo sacar dos discos (Magia y efectos especiales y Agujeros de gusano) gracias al crowdfunding. Pero ahora, además, cuenta con el primero de sus galardones y toda la marca internacional que esto conlleva.
Brasil, cuna de la música indie
indieCada año los organizadores apuestan por romper las barreras fronterizas y conmemorar la cultura musical de otros rincones del globo. Esta vez México repite en calidad de colaborador periódico. Los Indie-O Music Awards y los Premios de la Musica Independiente cuentan con el Premio IMAS al mejor artista mexicano, que ya han ganado Instituto Mexicano del Sonido, Disco Ruido, Austin TV y Chavela Vargas. Además, el premio UFI al mejor artista español se entregó en abril en la capital mexicana a Triángulo de Amor Bizarro, que competía con cuatro finalistas, Dorian, Guadalupe Plata, Joe Crepúsculo, y Oso Leone.
Por otra parte, el país que completa el tándem de la excelencia latinoamericana, es el invitado en esta sexta edición de los premios: Brasil. Sobre todo en Río de Janeiro y Sao Paulo existen dos mundos bien diferenciados: el de la industria tradicional (majors, editores, payola) y el sector independiente (jóvenes representantes, artistas do it yoursef, sellos y festivales indie). Son estos últimos los que están floreciendo y sirviendo como referente, con todos los matices que Brasil aporta, para el caldo de cultivo de Occidente.
¡Aún puedes votar!
Los artistas fueron seleccionados en una primera fase por un jurado de postín, pero ahora está en manos del público elegir entre los finalistas. Los mallorquines Oso Leone son una apuesta segura en las principales categorías, tras sorprender hace un par de temporadas con un álbum homónimo en el que el folk era el género dominante. Se les unen los asturianos y más lonjevos Leon Benavente por su álbum, mejor directo y como artistas predilectos. Pero también el dueto Za! y el blues castellano de Guadalupe Plata.
El certamen también encuentra un hueco para premiar a los mejores artistas internacionales, bastante menos desconocidos. En esta reñida categoría se disputan el original premio grupos del nivel de Nick Cave and The Bad Seeds, Queens of the Stone Age o Vampire Weekend.