SFDK no descarta acciones legales contra el festival que denunció su rechazo a la formación de género

“Voy a intentar ser rapidito para evitar la vergüenza que me da grabar este vídeo”, así empieza Zatu, el rapero sevillano miembro de SFDK, su respuesta en redes ante la polémica suscitada cuando el festival barcelonés BioRitme anunció que no les volvería a contratar por negarse a recibir “formación con perspectiva de género”. El vídeo de Zatu se ha visto acompañado en un comunicado oficial de la banda que anuncia acciones legales contra el festival porque su imagen se ha visto “dañada”.

El pasado viernes 23 de agosto, el grupo de rap SFDK actuó como uno de los cabezas de cartel de este Festival celebrado en la localidad de Vilanova de Sau en Barcelona. Pero según afirmaba la organización, no realizó la formación de género que el festival tenía como parte de su protocolo, y volvió a negarse a reunirse con la comisión de género después de que una asistente se declarase ofendida por sus letras. Así que la organización hizo público un comunicado en el que afirmaba que no volvería a contratar a la banda.

“Eso de que SFDK no quiso salirse a realizar un curso de formación de género”, cuenta el artista, “primero aclarar la parte técnica: que por contrato yo nunca firmo una clausula ni nada que me obligue a eso, es más, ese festival firma el contrato que nosotros le mandamos”, sostiene el rapero en el vídeo. “No firmamos uno que ellos nos manden y esa clausula os aseguro que no existe”.

“Yo soy una persona, como todo el mundo que me sigue sabe, que yo escucho a la gente... Pero diez minutos [antes de actuar], veinte, que me informaron de que tenía que dar una charla, del tipo que sea, pues no es bienvenida”, opina Zatu en su perfil. “Más que nada porque cualquier profesional que se precie en cualquier gremio, diez minutos de ir a realizar un trabajo, y más cuando hay miles de personas mirando, pues está uno ajustando las herramientas y haciendo que todo esté seguro para que todo salga bien. No tiene la cabeza en otra cosa”.

Según los organizadores del evento todas las personas que participan en el festival reciben información sobre la existencia de un protocolo de género y un Punto Lila, habilitado por la organización para prevenir, abordar y visibilizar las agresiones machistas y LGTBIfóbicas.

En este sentido, “los y las artistas y el equipo firman una clausula en la que se les informa de la existencia del protocolo contra las agresiones machistas”, explicaban desde la organización. Sin embargo, en el caso de la banda que nos ocupa, “no se pudo hacer la formación de género a SFDK porque el equipo técnico de la banda se negó”.

Queja por sus letras

Además del curso de formación de género, según la organización del festival BioRitme, una asistente al concierto se acercó al Punto Lila “para manifestar que el contenido de las letras del grupo estaba hiriendo su sensibilidad”. Así que después de la actuación, la comisión de género de BioRitme solicitó de nuevo encontrarse con los miembros de SFDK para “comunicarles los hechos y trasladarles la necesidad de la formación previa”.

La versión según el comunicado oficial del grupo, realizado por toda la banda y el equipo técnico de SFDK, es que les sorprendió “que unos segundos después de finalizar nuestro concierto, se lanzara un mensaje grabado en el cual se notificara al público asistente que se había cometido una agresión machista durante nuestra actuación”.

Y añaden que “acto seguido, la comisión de género se dirige al Tour Manager para notificarle que UNA persona se ha sentido ofendida en algún momento del concierto y necesitan hablar con la banda”. Según cuentan los raperos, “nuestro Tour manager les pide que informen sobre qué comentario o con qué canción ha surgido la queja, para poder establecer un diálogo al respecto”. Y que, sin embargo, “la comisión de género se negó en todo momento a aclararnos cuál fue el comentario o la letra que hirió la sensibilidad de esta persona y también se negó a establecer diálogo con nuestro Tout Manager, que es le representante de la banda en estos casos”.

Según Zatu en el vídeo, todo ha devenido “en una situación muy incómoda”. Para el cantante “ya es la parte moral de que 'como no conseguimos esto', publicar un comunicado sobre el grupo, e intentar manchar el nombre de una banda: esto se lo haces a una banda con menos recorrido y te la cargas”.

En el comunicado oficial de la banda, el grupo concluye: “Nuestra imagen se ha visto injustamente dañada a raíz de los comunicados del festival BioRitme y nos reservamos el derecho a emprender acciones legales contra los responsables de esta situación”.