El cantante Joaquín Sabina ha abandonado este domingo, sobre las 11.30 horas, el Hospital Ruber Internacional de Madrid, donde estaba ingresado, tras ser sometido el pasado 13 de febrero a una intervención quirúrgica de evacuación de hematoma intracraneal.
Según ha confirmado a Efe su representante, José Navarro “Berry”, el cantante se encuentra “bien” y deberá ahora guardar reposo en casa durante un tiempo.
El 12 de febrero, Sabina sufrió una grave caída en el Wizkink Center de Madrid durante un concierto junto a Joan Manuel Serrat. Cayó al foso desde el escenario, a una altura aproximada de 1,70 metros, y aquejado de un fuerte dolor en el hombro hubo de interrumpir y posponer su actuación.
Tras los exámenes pertinentes, se diagnosticó que presentaba “traumatismo de hombro izquierdo, torácico y craneoencefálico”, así como un “pequeño coágulo” del que fue intervenido sin complicaciones a la mañana siguiente.
Tras permanecer seis días en la UCI, el pasado martes fue trasladado a una habitación en planta al presentar “una evolución favorable”, según informó entonces el centro médico “a petición del paciente”.