La tecnología puede ser el medio para transmitir a las nuevas generaciones la herencia de los pueblos ancestrales de América Latina, dijeron expertos reunidos en Bogotá con motivo del XIV Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco que concluye este sábado.
La directora general del Centro Regional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de América Latina (Crespial), Adriana Molano, dijo a Efe que la Convención de la Unesco de 2003 que trata estos temas, aunque “nace por la preocupación con la globalización misma”, tiene en esta “una herramienta que se puede usar positivamente”.
“Muchas comunidades locales tienen una forma de comunicarse más fácil desde lo audiovisual y desde las nuevas tecnologías que desde lo escrito”, afirmó.
El Crespial, que se creó bajo los auspicios de la Unesco, fomenta desde 2006 la cooperación entre 16 países latinoamericanos con el fin de promover la diversidad cultural, el desarrollo sostenible y la gobernanza cultural.
TECNOLOGÍA Y PATRIMONIO
Molano asegura que muchos de los proyectos culturales utilizan las nuevas tecnologías porque “permiten cierta democratización” para que las comunidades indígenas y rurales “tengan acceso a la información y al conocimiento”.
El Crespial ofrece programas de capacitación por medio de materiales didácticos y técnicos, cursos virtuales dirigidos a funcionarios de los Gobiernos, miembros de comunidades y representantes de la sociedad civil, así como la formación de nuevos expertos en Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI).
Eso permite crear una red de facilitadores en la región que reconocen el patrimonio, lo visibilizan y divulgan.
Ejemplo de ello es un programa desarrollado con estudiantes de cuatro instituciones educativas de Cusco (Perú) con el que mediante investigaciones de sus manifestaciones culturales los jóvenes crearon unas plataformas digitales en las que se puede navegar por el patrimonio vivo de sus localidades a través de Códigos QR.
LLEGAR A NUEVAS GENERACIONES
Molano aseguró que la tecnología es un canal para que los jóvenes se sensibilicen y entiendan lo que está sucediendo con sus tradiciones y de esta forma ayuden a fortalecer el patrimonio.
“Actualmente lo que está más afectado en el patrimonio inmaterial son las formas de transmisión tradicional ya que no siempre funcionan”, explicó.
Por eso, la experta considera importante “que los Estados den las herramientas a las comunidades para que ellas de una forma más horizontal sean quienes puedan tomar las decisiones de si quieren tecnologizarse totalmente o no”.
ESCUELAS TALLER
Un mecanismo que articula la educación para la transmisión de prácticas ancestrales es el programa Escuelas Taller de Colombia, que tiene el objetivo de recuperar el patrimonio y generar oportunidades de desarrollo para la población joven.
Las Escuelas Taller son uno de los pilares de la estrategia de protección de la artesanía tradicional para la construcción de la paz, inscrita esta semana en el Registro de Buenas Prácticas para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco.
Se trata de una alternativa que “permite que los jóvenes se apasionen por las prácticas ancestrales y aprendan estos oficios de los viejos”, afirmó Molano.
El director de Patrimonio del Ministerio de Cultura de Colombia, Alberto Escobar, manifestó que ante la dificultad de las personas mayores para llevar su conocimiento a las nuevas generaciones crearon con las Escuelas Taller “una metodología para la salvaguarda de estos oficios que están vinculados a un territorio en el mundo patrimonial”.
“Las manifestaciones al final solo pueden pervivir en el tiempo si hay gente que las aprende y las mantiene, si se rompe ese vínculo entran en desuso y se pierden”, expresó.
El director del Departamento de Patrimonio Inmaterial del Instituto de Patrimonio Histórico y Artístico Nacional (IPHAN) de Brasil, Hermano Fabricio Oliveira, también defendió “la utilización de las nuevas tecnologías en favor del patrimonio y la documentación”.
“Las acciones deben estar encaminadas a que las comunidades creen conciencia de su identidad y tengan mecanismos para hacer resistencia frente a los cambios que viven hoy” porque son ellas quienes “construyen el patrimonio día a día”, concluyó.
Daniela Arias Baquero