Lejos quedan las elecciones de 2017, cuando Ciudadanos consiguió ser la primera fuerza en Catalunya con más de un millón de votos. Este 14F, Vox se ha situado como líder de la derecha no independentista. El partido de Ignacio Garriga ha superado a PP y Cs en 739 municipios, o lo que es lo mismo, en 4 de cada 5 localidades catalanas. El PP ha sido la primera fuerza de este bloque en 172 municipios y Cs, en 153.
Unos comicios que han confirmado los peores augurios para el Partido Popular y para su líder, Pablo Casado, con la finalización del escrutinio. Por primera vez en unos comicios desde su nacimiento, en 2013, Vox ha superado en votos y escaños al PP. La formación de extrema derecha ha conseguido sus mejores resultados en las cercanías de la ciudad Tarragona, en el entorno de Figueres y Roses (en Girona) y en la Vall d'Aran. Justamente en esta comarca pirenaica se encuentra Vilamòs, el pueblo donde la formación verde ha alcanzado sus mejores porcentajes: el 25% de los votos.
El voto más alto al PP ha sido en Gimenells i el Pla de la Font (25%) y en Pontons (16%), los dos municipios que esta formación ha gobernado durante la última legislatura municipal. Ciutadans solo ha conseguido superar el 10% de los votos en un municipio, Vila-seca, pero Vox le ha duplicado. La formación de extrema derecha se estrena en el Parlament entrando como la cuarta fuerza de Catalunya, con 11 diputados. El PP, con el peor resultado de su historia, queda en cambio relegado como el partido con menos apoyo del nuevo hemiciclo.
Los de Garriga han conseguido este 14F más de 200.000 votos que le han permitido irrumpir en el Parlament catalán. Sin embargo, la suma de las derechas ha perdido 20 diputados respecto a las elecciones de 2017. En número de votos, más de 800.000 personas han dejado de votar a PP y Ciutadans, pero tampoco se han sumado a Vox. Los populares no logran rentabilizar la caída de Ciudadanos, mientras la extrema derecha les triplica en escaños y suma más diputados que PP y Ciudadanos juntos.
La mayor caída del grupo se la lleva Ciutadans, que ha perdido casi 9 de cada 10 votos de los que obtuvo en 2017, cosa que le ha hecho perder 30 escaños. Por su parte, el PP ha conseguido un escaño menos, perdiendo casi 80.000 votos.
La fuerza de la extrema derecha de Ignacio Garriga se ha sentido sobre todo en la provincia de Tarragona, donde ha obtenido su mayor porcentaje de votos y también entra con fuerza en el área metropolitana de Barcelona donde se convierte en cuarta fuerza o incluso tercera en algunos municipios. Municipios como L'Hospitalet, Terrassa o Badalona, en Santa Coloma o en Cornellà.
Vox es más fuerte entre los jóvenes y nacidos fuera de Catalunya
Si analizamos los votantes según su perfil de población, Vox ha conseguido sus mejores resultados en los municipios catalanes con mayor población joven. También lo ha hecho donde hay más porcentaje de residentes nacidos fuera de Catalunya, tanto en el resto de comunidades autónomas como entre los municipios con más población inmigrante.
El partido liderado por Santiago Abascal ha conseguido sus mejores resultados en las ciudades del área metropolitana de Barcelona y de la costa de Tarragona, con mayor densidad de población y menos movilizadas en las elecciones autonómicas.