Roma, 13 dic (EFE).- La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha anunciado este viernes que su barco de búsqueda y rescate, el Geo Barents, “pone fin a sus operaciones en el Mediterráneo central” de momento debido a “leyes absurdas y sin sentido” del Gobierno italiano que preside la ultraderechista Giorgia Meloni.
“A pesar de las más de 12.675 personas rescatadas y las 190 operaciones de rescate realizadas desde junio de 2021, MSF anuncia el fin de sus operaciones debido a leyes absurdas y sin sentido, desde el decreto Piantedosi de enero de 2023 hasta su endurecimiento en diciembre de 2024”, revela en un comunicado.
La ONG alude a la norma impulsada por el ministro de Interior italiano, Matteo Piantedosi, que complica sobremanera las labores de rescate de las ONG en el Mediterráneo y que permite el bloqueo de sus barcos, aprobada por el Gobierno Meloni, que tiene como caballo de batalla de su Ejecutivo frenar la inmigración irregular.
MSF “volverá al mar lo antes posible para salvar vidas en el Mediterráneo central, donde más de 31.000 personas han muerto o desaparecido desde 2014 y confirma su compromiso de asistir a las personas en movimiento en una de las rutas migratorias más mortíferas del mundo”, explica.
“También volveremos para ser testigos y denunciar las violaciones cometidas contra las personas migrantes por parte de Italia, los Estados miembros de la UE y otros actores”, afirma en la nota Juan Matías Gil, jefe de misión de búsqueda y rescate de MSF en el mar.
La ONG recuerda que en los últimos dos años, el Geo Barents ha sido objeto de cuatro sanciones por parte de las autoridades italianas, con un total de 160 días de detención administrativa, “por el simple hecho de cumplir con su deber humanitario y legal de salvar vidas en el mar”.
Además, “la práctica de las autoridades italianas de asignar puertos lejanos, a menudo en el norte, para el desembarco de las personas rescatadas en el mar ha socavado aún más la capacidad del Geo Barents para rescatar vidas en el mar y estar presente donde más se le necesita”.
“En lugar de utilizar la capacidad de rescate de los buques humanitarios, las autoridades italianas socavaron su operatividad. Las leyes y políticas italianas expresan un verdadero desprecio por la vida de las personas que cruzan el Mediterráneo», afirma Margot Bernard, coordinadora de proyectos de MSF.
«Las historias de decenas de miles de supervivientes resuenan por todas partes en nuestro barco, los niños han dado sus primeros pasos en estas cubiertas, la gente ha llorado a sus seres queridos. Cuando las políticas europeas de disuasión causan tanto sufrimiento y cuestan tantas vidas, tenemos el deber de defender a la humanidad“, añadió.
El Geo Barents, activo desde junio de 2021, ha rescatado a 12.675 personas en190 operaciones, recuperado los cuerpos de 24 personas, organizado la evacuación médica de 18 personas y asistido el nacimiento de un niño.
En los dos años transcurridos desde la entrada en vigor del decreto Piantedosi, “MSF y otras ONG presentaron 5 quejas individuales a la Comisión Europea, invitándola a examinar las restricciones a la luz de la legislación de la UE, pero hasta ahora sin éxito”, concluye la organización.