El joven subsahariano ingresado ayer en la UCI del Hospital Comarcal de Melilla por traumatismo craneoencefálico severo, tras caerse de la valla fronteriza, permanece grave en situación de coma inducido como tratamiento de la hipertensión craneal que padece tras la caída accidental.
El delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, ha informado este domingo a los periodistas de que esta persona cayó al suelo desde seis metros de altura, junto con otros tres subsaharianos, después de que un tramo de valla cediera parcialmente por el peso y por las fuertes rachas de viento que padecía la ciudad.
El Barkani asegura que tres de los hombres cayeron encima de él produciéndole las graves lesiones de las que está siendo atendido y ha añadido que “estamos a la espera de que evolucione lo mejor y lo antes posible para que pueda abandonar el hospital”.
En cuanto a las otras tres personas que cayeron con él y que también resultaron heridos, el delegado del Gobierno ha dicho que fueron atendidos en urgencias por traumatismos leves y dados de alta, tras lo que fueron trasladados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
El Barkani ha precisado que hubo otra persona que tuvo que ser trasladada en la tarde de ayer al hospital después de permanecer más de nueve horas sobre la valla y que fue atendido de lesiones leves y trasladado al CETI.
Devoluciones en caliente
Según la Delegación del Gobierno, un centenar de personas intentó saltar a las 7:30 horas de este sábado a escasos metros del paso fronterizo del Barrio Chino que es una de las zonas más empleadas en sus intentos por la cercanía a los campamentos del Gurugú y por la presencia de viviendas en el lado marroquí.
Tras la actuación de las autoridades marroquíes y de la Guardia Civil, 30 personas lograron acceder a la valla quedando encaramados en la alambrada durante más de diez horas. Los primeros hombres no empezaron a bajar hasta pasadas más de cinco horas desde que tuvo lugar el salto, que se prolongó hasta poco antes de las seis de la tarde, cuando bajaron los últimos cuatro que quedaban.
Varias de las personas encaramadas a la valla de Melilla fueron devueltas en caliente por la Guardia Civil a territorio marroquí. Según muestran fotos tomadas en la alambrada, descendieron por las escaleras facilitadas por los agentes y “retornado”, según Delegación de Gobierno, al interior de Marruecos.
Un mes después del último salto
El intento de entrada de este sábado se produjo más de un mes después de que se registrara el último, el 10 de octubre, cuando un centenar de personas trató de acceder de forma a Melilla. 30 de ellos lo consiguieron, protagonizando la primera entrada por la valla tras más de seis meses.
La Delegación del Gobierno ha admitido que se ha producido “un notable cambio” en los flujos migratorios porque, si bien la presión sobre la valla “no cesa”, la situación de 2015 “es muy distante” de la que había en 2014, que terminó con más de 70 saltos masivos y más de 2.000 entradas.