- El pasado mes de noviembre se produjo un brote de sarampión en el campo de refugiados de Yida. MSF ha puesto en marcha una campaña de vacunación para frenar la epidemia y para aumentar la cobertura de inmunización entre la población, que así quedaría inmunizada ante posibles nuevos brotes.
El pasado mes de noviembre se produjo un brote de sarampión en el campo de refugiados de Yida. MSF ha puesto en marcha una campaña de vacunación para frenar la epidemia y para aumentar la cobertura de inmunización entre la población, que así quedaría inmunizada ante posibles nuevos brotes.
El objetivo del equipo de MSF en Yida es vacunar al 90% de los 35.000 niños que viven en el campo de refugiados y en las comunidades de acogida cercanas.
Para ello, la organización ha contratado a más de 100 personas, de entre la propia población del campo de refugiados, que ayudan en la campaña.