Roma, 14 sep (EFE).- El Open Arms Uno, el nuevo barco humanitario de la ONG española Open Arms, ha rescatado en su primera misión a 19 personas que viajaban a la deriva en el Mediterráneo Central y que revelaron que una mujer había muerto durante la travesía al caer al agua.
“Rescatadas 19 personas a la deriva en aguas internacionales, 6 niños 2 de ellos bebés, y perdieron una mujer que cayó al agua. Son de Siria y Sudan: los ”otros“ refugiados. Aquí seguimos en el Mediterráneo, siempre estamos, no nos fuimos y no nos vamos porque CadaVidaCuenta”, escribió el fundador de Open Arms, Oscar Camps, en redes sociales.
“Las personas rescatadas nos contaron que una mujer cayó al agua sin poder recuperarla. Al parecer viajaba con su primo a bordo de la embarcación, durante días a la deriva y sin ayuda. El Mediterráneo sigue matando. Basta”, explicó la ONG.
El Open Arms Uno zarpó el pasado 9 de agosto del puerto de Barcelona para unirse con el con el velero Astral en el Mediterráneo Centra, donde, en lo que va de año, más de 1.000 personas han perdido la vida intentando llegar a Europa, según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El barco de Opens Arms se suma a otras dos naves humanitarias, Humanity1 y Sea Watch 3, que se encuentran en la zona y entre las tres han rescatado a casi 900 personas que están actualmente a la espera de que se les permita desembarcar.
Tras cuatro rescates, la nave de SOS Humanity navega con 415 supervivientes “que necesitan urgentemente un refugio seguro! Casi la mitad (192) son menores de 18 años, incluidos 113 menores no acompañados. Algunos rescatados tienen heridas”, según la ONG.
El otro barco, el Sea Watch 3, suma ya 428 migrantes a bordo, después de múltiples rescates en los últimos días, con lo que son en total 898 los rescatados que necesitan urgentemente que se les asigne un puerto seguro en el que desembarcar.
“Son personas a las que la UE preferiría ver muertas o en centros de detención en Libia”, según la ONG Sea Watch, para la cual “la UE antepone las políticas migratorias a los derechos humanos” antes de añadir: “¡Estas políticas racistas de aislamiento deben parar! ¡Libertad de movimiento para todos!”,.
En lo que va del año han llegado a las costas italianas cerca de 62.000 migrantes, frente a los 40.000 del mismo periodo de 2021, según los datos actualizados del ministerio del Interior.