Los niveles extremos de violencia que sufre la población civil y, en particular, la persecución de la minoría musulmana en la República Centroafricana (RCA), muestran el fracaso de las iniciativas internacionales para proteger a la población.

Miles de personas se encuentran atrapadas en hospitales, iglesias o mezquitas, amedrentados y temiendo por sus vidas

Más de 250.000 centroafricanos se refugian en los países vecinos.