Los padres de algunas de las niñas secuestradas por Boko Haram inician una huelga de hambre

Agencias/eldiario.es

Algunos de los padres de las más de 200 niñas secuestradas el pasado 14 de abril en una escuela de Chibok, en el estado nigeriano de Borno, han iniciado una huelga de hambre para protestar por el rapto y por la impotencia ante la falta de actuación hasta la fecha de las autoridades. Boko Haram, el grupo armado que capturó a las menores, lucha por imponer la “sharía” o ley islámica y se opone a la escolarización de las niñas en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.

El líder de la comunidad Chibok en Abuya, Hosaih Sambido, reveló el inicio de la huelga durante una protesta celebrada el martes por la tarde frente a la sede del Cuartel General de la Defensa en la capital para reclamar al Gobierno que actúe para conseguir la liberación de las niñas, según informa este miércoles el diario local 'Punch'.

“Desde el 14 de abril estamos en medio del trauma de no tener noticias”, después de que “los insurgentes vinieran, incendiaran nuestra localidad y se llevaran a 276 niñas. Aunque 53 de las chicas escaparon por su cuenta, hasta ahora no sabemos dónde están el resto y la situación a la que se enfrentan”, ha lamentado.

“Sus padres no pueden hacer nada. Algunos se niegan a comer. Algunos de los hombres se han movilizado y han ido a los bosques dos veces pero han vuelto porque los secuestradores son demasiado fuertes”, ha explicado.

Sambido ha lamentado que “hasta ahora no hay nada parecido a un proceso de rescate”. “Suplicamos al Gobierno federal y al Ejército que intervenga en este asunto. Nuestra comunidad es relativamente pequeña y si esta generación de la misma edad se pierde, ¿dónde vamos a conseguir los líderes en el futuro? Por favor, ayudadnos”, ha reclamado.

Por su parte, según el diario, el portavoz del Ejército nigeriano, general Chris Olukolade, ha revelado que algunas de las niñas secuestradas por Boko Haram son hijas de militares. En un discurso dirigido a los manifestantes congregados, principalmente mujeres, el portavoz ha asegurado que el Ejército entiende la situación: “vuestras preocupaciones son nuestras preocupaciones, estos niños también son nuestros niños”.

“En este edificio hay personas que tienen hijos entre las niñas secuestradas, así que compartimos vuestra preocupación y estad seguros de que no dejaremos a los nigerianos solos en esto”, ha remachado.

La Policía anuncia recompensa por información

La Policía nigeriana ha anunciado este miércoles una recompensa de 50 millones de nairas (algo más de 222.000 euros) a cambio de “información creíble” que permita localizar a las más de 200 niñas secuestradas desde el pasado 14 de abril por el grupo islamista Boko Haram.

En un comunicado, la Policía “insta a todos los ciudadanos patriotas con información útil” que permita “localizar y rescatar a las estudiantes secuestradas en una escuela secundaria de Chibok, en el estado de Borno” a llamar a seis números de teléfono.

Por otra parte, la Policía ha aprovechado para, además de “pedir a la población que forme parte de la solución al actual reto de seguridad”, “tranquilizar a los ciudadanos de que la información aportada será tratada de forma anónima y con la máxima confidencialidad”.

Nuevo atentado

Al menos 200 personas murieron en Nigeria en un nuevo ataque supuestamente cometido por la secta radical islámica Boko Haram en el estado norteño de Borno, informó hoy el diputado federal Abdulrahman Terab desde la zona del suceso. El ataque, que ocurrió el pasado lunes pero que ha trascendido hoy, tuvo lugar en la localidad de Gamboru, fronteriza con Camerún, declaró Terab al diario local “Daily Trust”. “La gente está todavía contando los cadáveres. Han contando más de 200 y aún no han acabado”, dijo el diputado, representante de la zona en la Cámara Baja del Parlamento nacional, en Abuya.

“No hay familia que no se haya visto afectada en Gamboru”, subrayó Terab, al precisar que la población está oficiando funerales para enterrar a los muertos. Un superviviente de la matanza, Mohamed Abari, de 60 años, ha relatado a los periodistas que las víctimas mortales podrían ascender a 300.

Los atacantes, que vestían indumentaria militar, invadieron la localidad por la noche en docenas de camionetas y motocicletas, destruyeron más de 250 casas y dispararon a discreción contra los lugareños, según los testigos. “Cuando los pistoleros llegaron, mucha gente estaba durmiendo. Yo me desperté por el ruido de los disparos y los gritos de angustia de quienes fueron tiroteados o forzados a salir de sus casas incendiadas. No recibimos ninguna ayuda”, añadió Abari, quien se ocultó en un bosque durante varias horas antes de poder huir a la capital de Borno, Maiduguri, a unos 200 kilómetros la localidad de la localidad atacada.

“Otro residente que escapó, después de esconderse varias horas, me dijo, cuando nos vimos en el bosque, que él personalmente había contado más de 300 cuerpos”, dijo Abari, quien puntualizó que los atacantes también usaron explosivos y lanzagranadas.

Esta agresión no ha sido reivindicada por ningún grupo, pero se sospecha que pudo ser obra de Boko Haram, autor de numerosos ataques en el estado de Borno, base espiritual y de operaciones de la milicia islámica.