Un gran empresario de una compañía ficticia que trafica con personas se enciende un puro con el texto de la Convención de Ginebra de 1951, el estatuto de las personas refugiadas. Es el protagonista del vídeo de animación con el que la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha denunciado hoy el “gran negocio” a costa de las políticas europeas de cierre y externalización de fronteras.
Según critican, el blindaje de Europa “está condenando a millones de personas desesperadas a poner sus vidas en manos de traficantes para poder huir de la persecución, la violencia y la extrema pobreza”.
Como ejemplo, la ONG menciona la Cumbre de Malta, donde los líderes europeos pactaron destinar millones de euros a Libia para frenar la ruta del Mediterráneo. Según CEAR, miles de personas quedarán atrapadas en el país “sin importar que sean confinadas en cárceles o que mueran congeladas a las puertas o, incluso, en plena Europa”, denuncia Estrella Galán, secretaria general de la organización.
El eslogan de esta empresa de ficción es claro: “Sin vías legales, dinero a raudales”. Los refugiados y migrantes llegan a pagar unos 3.000 euros de media en su travesía hasta suelo europeo, destaca CEAR, una cifra que se incrementa a medida que se ponen “nuevos obstáculos” a su llegada.
Según la Europol, cerca del 90% del millón de personas que llegaron a Europa en 2015 se vieron obligadas a recurrir a vías informales. Con esta campaña, CEAR exige a la Unión Europea que cumpla los mecanismos legales que permiten solicitar asilo de forma segura.