El Banco de España aprecia que los bancos están aumentando las exigencias para conceder créditos, ante la preocupación por los riesgos económicos que trae consigo la crisis del coronavirus. En un informe presentado este viernes sobre las condiciones de financiación a hogares de empresas, el organismo supervisor considera que “se aprecian signos de un cierto endurecimiento en los criterios de concesión de préstamos, vinculados con la mayor preocupación de las entidades financieras por los riesgos”.
El informe señala que hasta el momento, no se ha producido un deterioro en la calidad del crédito con un aumento de la morosidad, que se ha seguido reduciendo durante todo el año 2020. Sin embargo, sí aprecia que hay una menor confianza sobre las condiciones económicas por parte de los bancos, lo que lleva a endurecer las condiciones para la concesión de créditos.
El Banco de España considera que en un contexto en el que los tipos de interés están tan bajos, el coste de la financiación ha tocado a finales del año pasado su “mínimo histórico”. “Los costes de las nuevas operaciones crediticias con las familias y las empresas han seguido en niveles muy reducidos, registrándose caídas adicionales durante el segundo semestre de 2020”, señala el informe publicado este viernes.
Sin embargo, el Banco de España considera que el coste no está bajando en todos los créditos al mismo nivel que la bajada de los tipos de interés. “Estos descensos han sido, en muchas categorías de crédito, algo menores que la reducción de los tipos de interés de mercado, ampliándose desde el verano el diferencial entre ambos”, apunta el organismo. “En términos de precio, los márgenes aplicados se habrían ampliado, tanto en los préstamos ordinarios como en los de mayor riesgo, mientras que las entidades financieras habrían limitado el importe de los préstamos y de las líneas de crédito y habrían aumentado las garantías requeridas para conceder financiación”, señala el Banco de España.
El Banco de España señala que la información recogida de una encuesta entre las entidades financieras muestra que se está produciendo “un endurecimiento de las condiciones aplicadas a los préstamos a las empresas y a los hogares para el consumo durante la segunda mitad del 2020”, coincidiendo con el auge de la segunda ola de la pandemia. “Esto se habría reflejado en un aumento de la proporción de préstamos denegados, en el cuarto trimestre de 2020, en todos los segmentos de crédito. En el caso de la financiación a los hogares, el endurecimiento en el segmento de crédito para la compra de vivienda habría sido moderado y se habría producido únicamente en el tercer trimestre (en el cuarto no habría habido cambios) como resultado de la menor tolerancia al riesgo por parte de las entidades financieras y de las expectativas de debilidad de la actividad económica en general”, subraya.
El informe pone de relevancia, respecto a la financiación de las empresas, que las medidas de apoyo público mediante los avales en el ICO “habrían contribuido a mejorar el acceso y las condiciones de financiación de las empresas y de los autónomos”. El Banco de España señala que, pese a ello, se han endurecido los criterios de concesión debido a “las peores expectativas sobre la actividad económica en general y de las perspectivas de ciertos sectores o empresas, así como a los mayores riesgos sobre las garantías solicitadas”. Este endurecimiento se dio a pesar del apoyo de las líneas de avales públicos, aunque la mejora de las condiciones de estas y la implementación de la segunda línea en la parte final del año habrían podido contribuir a moderar el grado de endurecimiento en el cuarto trimestre de 2020 .