La materialización de las tensiones proteccionistas tiene un impacto adverso y potencialmente persistente sobre las exportaciones españolas. Esta es una de las conclusiones de un estudio del Banco de España que analiza el impacto de las trabas arancelarias que Estados Unidos puede poner en marcha como respuesta a los subsidios de la UE a Airbus. El regulador apunta que el incremento desde el 3,5% actual hasta el 25% en aranceles a los productos agroalimentarios se traducirá en “un descenso de las ventas de estos productos a la economía norteamericana de, al menos, el 12%. Este impacto equivale al 0,01% del PIB, en función del peso de esas exportaciones en el total de las ventas españolas de bienes al resto del mundo (0,3%)”.
Este 0,01% del PIB de caída que pronostica el servicio de estudios del Banco de España equivale a los 1.000 millones de euros que ya anunció la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez que caerían las exportaciones de productos agroalimentarios. España exportó a Estados Unidos productos por valor de 12.791,1 millones de euros en 2018. Entre el conjunto de exportaciones, en cuarto y quinto lugar hay productos directamente tocados por los aranceles como el aceite de oliva (405 millones) y el vino (299 millones).
Los cálculos del estudio del Banco de España argumentan que “un aumento del 1% de los aranceles a la importación impuestos por otro país para un producto español implica una reducción de las exportaciones nominales de aproximadamente el 0,6%”.
Pero además, el Banco de España avisa de que “el efecto negativo de los aranceles afecta a la capacidad exportadora a largo plazo, ya que, de acuerdo con estimaciones realizadas con retardos de los aranceles, el impacto de las tarifas es persistente en el tiempo”.
Tras recordar que “el comercio exterior constituyó una palanca de primer orden de la recuperación de la economía española después de la recesión iniciada en 2008”, los investigadores Eduardo Gutiérrez Chacón y César Martín Machuca “ponen de relieve la importancia de los acuerdos comerciales recientemente alcanzados por la UE con Japón, Canadá y MERCOSUR, que suponen la eliminación de aranceles en más del 9% del intercambio de bienes con estas regiones, a las que, en conjunto, se destina cerca del 3% de las exportaciones de bienes españolas”.
Plataforma contra los aranceles de EEUU
Ante esta situación, la industria de alimentación y bebidas y representantes del sector primario han constituido una plataforma para rechazar la imposición de aranceles en Estados Unidos a sus productos como represalia por el conflicto contra Airbus en el marco de la OMC y exigen tanto al Gobierno de España como a la Unión Europea la “máxima implicación y firmeza” ante esta amenaza a uno de los sectores más dinámicos de la economía española como es el agroalimentario, según han informado en un comunicado.
En concreto, los sectores afectados como el aceite, el vino o el porcino, entre otros, se han alíado para reclamar soluciones ante un escenario que amenaza con “perjudicar seriamente” la solvencia de este mercado estratégico y que podría suponer la pérdida de más de 5.000 empleos en España.
La plataforma le recuerda a Bruselas que recuerda que se puede hacer frente a la amenaza de la Administración Trump imponiendo tasas a productos estadounidenses ya que “cuenta con la aprobación de la Organización Mundial de Comercio (OMC) para imponer tasas a productos estadounidenses por valor de 4.000 millones de dólares”.