El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha solicitado a Bankia una información determinante en la instrucción del caso Bankia: la documentación que demuestre que la entidad tenía las provisiones necesarias para salir a bolsa, como defienden los imputados, algunos de los testigos que han pasado este verano por el despacho del instructor y niegan los peritos que firman el informe sobre el que se sostiene el caso.
En una providencia fechada este mismo martes, Andreu pide al presidente del Consejo de Administración de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, una certificación con fechas y apuntes contables que “justifiquen la existencia de provisiones, de todo tipo, a fecha 31 de marzo de 2011”, las cuales, según el folleto de salida a bolsa de Bankia deberían ser de 6.913 millones de euros. En el mismo escrito, al que ha tenido acceso eldiario.es, el juez pide idéntica documentación para la fecha del 31 de diciembre de 2010, momento previo a la fusión de las cajas.
La petición del juez se produce el día después de que el que fuera jefe de inspectores del Banco de España José Antonio Casaus declarara ante Andreu que Bankia era “una máquina de perder dinero” y que él ya advirtió en su momento de la “inviabilidad” de la entidad y de su inevitable nacionalización si llegara a salir a bolsa, como finalmente ocurrió.
En julio, Andreu imputó a Deloitte, la auditora encargada de supervisar las cuentas de Bankia. Su representante legal aseguró ante el juez que las provisiones existían, en la línea de lo que hizo el director del departamento de Supervisión del Banco de España, Jerónimo Martínez Tello. Tanto el Banco de España, como la auditora y la CNMV eran responsables del control y supervisión de Bankia. Las acusaciones han solicitado la imputación de los responsables del órgano supervisor y el regulador, pero el juez ha rechazado tal pretensión.
Los peritos que trabajaron durante 17 meses en el informe que sirve de prueba de cargo contra Rodrigo Rato y el resto de imputados aseguran que éstos maquillaron las verdaderas cuentas de la entidad con el fin de poder salir a bolsa, una decisión que a la postre resultó fatal para la entidad y provocó su rescate con 23.500 millones de euros de dinero público.
La documentación solicitada por Andreu ayudará a esclarecer la verdad sobre la salida a bolsa de Bankia y, en caso, de que demuestre que las provisiones no existían motivará que la acusación popular, ejercida por la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) denuncie a los testigos que afirmaron lo contrario ante el juez instructor del caso.