BBVA cierra su sucursal en las Islas Caimán pero mantiene abiertas cuatro sociedades en este paraíso fiscal

BBVA ha cerrado la sucursal que tenía en las Islas Caimán. El banco ha clausurado la oficina que tenía en este paraíso fiscal pese a la fuerte actividad que registró en 2017. Ese año el “centro financiero off-shore”, como lo define el propio banco en sus documentos sobre cuentas anuales e Informe de Gestión anualescasi triplicó el volumen de depósitos que tenía en este territorio, colocado por la Unión Europea en su lista gris por su estructura fiscal.

Tras el cierre de esta oficina, BBVA sigue manteniendo cuatro compañías en las Islas Caimán con más de 3.345 millones en deuda subordinada y titulaciones de deuda. BBVA no ha querido hacer declaraciones y se remite a lo publicado en sus documentos de informes de gestión. 

La sucursal del banco en este territorio tenía 1.144 millones de euros en depósitos a 31 de diciembre de 2017, frente a los 430 millones con los que contaba justo un año antes, lo que supone un incremento del 266%, tal y como figura en las cuentas consolidadas que la compañía depositó en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Pese al movimiento de dinero que tenía la oficina, la entidad ha decidido cerrarla. En el documento Cuentas Anuales e Informe de Gestión Ejercicio anual 2018 se señala que “El Banco, en el marco del Grupo, mantiene una política expresa sobre actividades en establecimientos permanentes domiciliados en centros financieros off-shore, la cual incluye un plan de reducción del número de dichos establecimientos. En esta línea, en el 2018 el Banco cerró la sucursal que tenía en las Islas Caimán”. 

A pesar de este cierre, el banco sigue manteniendo presencia a través de cuatro compañías en el paraíso fiscal, según se recoge en el mismo informe: “Los establecimientos permanentes de BBVA registrados en centros financieros extraterritoriales considerados como paraísos fiscales desde el punto de vista de la OCDE a partir de la normativa española son los emisores de valores: BBVA Global Finance Ltd., Continental DPR Finance Company, Garanti Diversified Payment Rights Finance Company y RPV Company”.

De esta manera, está la firma de servicios financieros BBVA Global Finance, con 179 millones en deuda subordinada; y otra empresa de servicio financieros Continental DPR Finance Compay, con 48 millones en activos.

Además de estas entidades el banco cuenta con dos compañías que pertenecen a grupo turco Garanti Bank, entidad financiera en la que el BBVA controla el 49,85%,  que suman la mayor parte de los activos del banco en el paraíso fiscal. Por un lado está la firma de servicios financieros Garanti Diversified Payment Rights Finance Company, con 1.793 millones en títulos de deuda (86 millones menos que el año anterior), y por el otro, RPV Company, con 1.329 millones en títulos de deuda (67 millones más que el año anterior). Entre todas las firmas, el BBVA mantiene 3.345 millones en las Islas Caimán. 

BBVA está envuelto en un problema reputacional desde que se hizo público que su ex presidente Francisco González había contratado al comisario Villarejo para espiar a una serie de personas durante el intento de compra del banco por parte de la constructora Sacyr en 2005.