La directora de la Agencia Tributaria, Beatriz Viana, ha presentado su dimisión, según ha anunciado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. Santamaría ha explicado que la decisión se debe a una “petición propia” de la ya exdirectora. El Ejecutivo ha nombrado ya a su sucesor, que será Santiago Menéndez.
Menéndez fue nombrado por Cristóbal Montonro director de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) y ahora estará al frente de la Agencia Tributaria. El asturiano ya ha ocupado cargos en Hacienda con gobiernos del PP: fue delegado especial de la Agencia Tributaria en Asturias (1998-1999) y ocupó el cargo de director de Recaudación de Hacienda con Aznar en el Gobierno. Santiago Menéndez es sobrino del que fue ministro de Educación con UCD, Aurelio Menéndez, y fundador del despacho de abogados Uría y Menéndez.
Preguntado en rueda de prensa por si la dimisión tenía relación con la polémica sobre los errores al atribuir la compraventa de unas fincas a la infanta Cristina, Montoro se ha limitado a ensalzar las cualidades de su recién dimitida colaboradora. “Ha hecho gala de una enorme profesionalidad y honorabilidad”, ha afirmado Montoro que ha lamentado que pierde una “excelente colaboradora”. El titular de Hacienda ha destacado que seguirá trabajando con ella.
Según Montoro, Viana “ha entendido que era el momento de su relevo” y lo ha hecho para fortalecer la imagen y la “credibilidad de la institución”.
“No sé ni lo que he dicho”
Otra de las polémicas que le afectó como directora de la Agencia Tributaria fueron sus declaraciones tras dar explicaciones sobre el caso Bárcenas y negar que el extesorero del PP se hubiera acogido a la amnistía fiscal. Sin ser consciente de que los micrófonos permanecían abiertos, Viana comentó que podría haber dicho “cualquier barbaridad”. “No sé ni lo que he dicho. Ahora me van a sacar cualquier barbaridad que haya dicho”, afirmó.