La familia Abarca Cidón, principales accionistas de HM Hospitales, uno de los mayores grupos de sanidad privada en España, acaba de crear una sociedad instrumental en Luxemburgo en la que participan a través de varias de sus firmas patrimoniales.
Se trata de LuxATM Investments S.à r.l, que ha echado a andar en plena pandemia de coronavirus. Con 300.000 euros de capital, empezó a operar el 16 de julio. Su principal administrador es Alejandro Abarca Cidón, que en el organigrama de HM figura como consejero delegado del grupo que preside su hermano, Juan Abarca.
Un portavoz de HM Hospitales declinó precisar el objetivo de esta nueva sociedad, ya que “no tiene nada que ver con HM” y “pertenece a la esfera personal de la familia Abarca Cidón”.
Su objeto, según la documentación disponible en el Registro de Luxemburgo, es muy amplio: desde “mantener participaciones en filiales y prestarles apoyo proporcionándoles servicios administrativos (legal, contable, de servicios) o relacionados con las actividades de esas subsidiarias” a “gestionar, desarrollar y disponer de una cartera de valores y patentes de cualquier origen, participar en la creación, desarrollo y control de cualquier empresa”, así como garantizar o recibir préstamos de compañías vinculadas.
Asimismo, “el propósito empresarial de la compañía es llevar a cabo todo tipo de operaciones como agente y promotor inmobiliario, así como actividades de gestor de propiedades y gestión de inmuebles”.
Un área en la que HM Hospitales se ha mostrado activa en los últimos meses. En enero, vendió dos de sus centros en Madrid (Torrelodones y Sanchinarro) al REIT estadounidense (equivalente a una socimi) Medical Property Trust por unos 250 millones para quedarse como inquilina.
Antecedentes
Esta no es la primera sociedad que han creado los Abarca en Luxemburgo en los últimos años. A finales de 2015 constituyeron Cadab Ventures, también con Alejandro Abarca como administrador y de otra de las patrimoniales de la familia, Cidaba SL. Esta última se dedica al alquiler de inmuebles y su administrador único es el patriarca del clan y cofundador, el cirujano y empresario Juan Abarca Campal, de 75 años.
La creación de este tipo de estructuras suele tener un propósito fiscal: poder deducirse en España los gastos de préstamos otorgados a firmas en Luxemburgo aprovechando la bajísima tributación de ese territorio, asegura un fiscalista que pide el anonimato. En el caso de Cidaba, en sus últimas cuentas (2019), explica que en septiembre 2019 concedió a una entidad vinculada “no residente” un préstamo, cuyo interés no detalla, por un importe máximo de 4,5 millones de los que “al cierre del ejercicio ya le han sido entregados 3.901.122,75 euros”.
En el caso de la nueva firma luxemburguesa, en ella participan cuatro sociedades españolas vinculadas a la familia. Algunas son o han sido accionistas de la matriz de HM, Profesionales de la Medicina y de la Empresa SL, de manera directa o a través de terceras sociedades como Cidotama SL o Carpe Fatum Proyectos SL.
La mayoría de los títulos de la nueva firma luxemburguesa (54%) está en manos de Mater Semper Certa SL (37%) y Telma 2013 SL (17%), cuya administradora única es la matriarca, Carmen Cidón Tamargo, de 74 años. El 46% restante se lo reparten a partes iguales Consultas y Análisis 2AC Gestión de Servicios SL (administrada por la vicepresidenta de HM, Elena Abarca Cidón) y ALAC 2013 SL (Alejandro Abarca Cidón).
Con más de 414 millones de euros de ingresos en 2018 (último dato disponible), cerca de 4.700 empleados, trece hospitales, dos hospitales materno infantiles, 21 policlínicos y tres centros monográficos de alta especialización, según sus últimas cuentas presentadas, HM Hospitales se fundó en 1989 y se ha convertido en un relevante actor del negocio de la sanidad privada gracias al crecimiento orgánico y a una agresiva política de adquisiciones.
Su presidente, Juan Abarca Cidón, llevó la voz del sector al Congreso en junio en la Comisión de Reconstrucción como presidente de la Fundación del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), el lobby de la sanidad privada. El empresario y médico defendió las bondades de la sanidad privada e instó a “normalizarla definitivamente” porque “la provisión sanitaria pública no es suficiente para absorber la demanda sanitaria de la población. Y ya, de la sociosanitaria ni hablamos”. “Cuanto menos se ha querido saber del sector privado mejor le ha ido a este y peor le ha ido al sector público”, aseguró.
Abarca defendió que esta actividad, sin pretender sustituir a la sanidad pública, es complementaria porque “libera recursos” de esta: “En el sistema sanitario privado, sin contar con la actividad que se desarrolla en los modelos de colaboración público-privados, se realiza el 23% de las altas hospitalarias, el 30% de las intervenciones quirúrgicas o el 25% de las urgencias totales de nuestro país. Hay más de 450 hospitales en nuestro país y más de 51.000 camas de hospitalización, y una prueba de su relevancia es el papel que ha desempeñado en esta crisis sanitaria tratando más del 20% de los ingresos en planta por COVID y el 15% de los ingresos en UCI”.
Colegios concertados
Los Abarca Cidón también tienen inversiones en ladrillo y hoteles y fuertes intereses en la educación concertada a través del grupo Educare, uno de los más potentes de la Comunidad de Madrid, con seis de sus ocho colegios construidos sobre suelo público. Antes de la pandemia, también han tanteado el negocio de las residencias para la tercera edad: el año pasado inauguraron en Leganés (Madrid) su primera residencia bajo la marca Valdeluz, en asociación con la constructora Arpada.
El grupo HM, que al inicio de la emergencia sanitaria pidió a parte de su plantilla que tomara vacaciones, como publicó elDiario.es, tiene una importante presencia en Galicia y en Madrid, donde gestiona sus siete hospitales a través de la sociedad HM Hospitales 1989. Esta sienta en su consejo de administración, además de a los Abarca, a uno de los socios fundadores de esta firma, Manuel Delgado Solís, ex consejero de ACS (dimitió en noviembre pasado tras verse salpicado en el caso Villarejo). Delgado llegó a estar imputado en el caso Gürtel junto al histórico secretario del consejo de HM, José Antonio López Rubal. Ambos fueron abogados de Francisco Correa, cabecilla de esa trama corrupta del PP.