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Exdirectivo de NGC dice que las indemnizaciones las cerraron las antiguas cajas
El exvicepresidente segundo de NCG Salvador Fernández Moreda ha dicho hoy que el Consejo de Administración y la Comisión de Retribuciones no cuantificó las indemnizaciones millonarias de los altos cargos de la entidad y que se limitó a ejecutar contratos procedentes de las antiguas cajas.
El que fuera presidente de la Diputación de A Coruña ha hecho estas declaraciones al término de su declaración como imputado ante el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, que investiga el cobro indebido de prejubilaciones millonarias por parte de ex altos cargos de la entidad.
Fernández Moreda, que fue también consejero de Caixa Galicia, ha asegurado que las tres personas a las que indemnizó esta entidad procedían de Caixanova y ha añadido que “cuando hay una fusión por el principio de sucesión universal, la empresa nueva que da origen y crea la fusión se subrogan todos los derechos laborales”.
Así, ha relatado que se aplicaron “contratos en vigor”, el más reciente de ellos de 2005, y que “ni el Consejo ni la Comisión de Retribuciones hizo ni cuantificó la indemnización, es la ejecución de un contrato, nada más”.
El exvicepresidente segundo de NGC ha explicado que ha “respondido a todas las preguntas” que se le han formulado.
“He entrado tranquilo y salgo tranquilo”, ha indicado Fernández Moreda, que ha defendido que ha acudido a la Audiencia Nacional sin estar “acusado de nada” y a “colaborar con la Justicia”.
Por su parte, José Fallula, abogado del letrado también imputado Ricardo Pradas, que informó al Consejo de Administración de la entidad de los beneficios que correspondían a los exdirectivos y que declaró como imputado el pasado lunes, ha coincidido en que estos contratos, además de “correctos”, eran “evidentemente ya existentes”.
Fallula ha manifestado que su cliente “hizo el armazón de los contratos” y, sobre las cantidades fijadas para las retribuciones, ha precisado que “era el banco el que las ponía con la Comisión de Retribuciones y el Consejo de Administración”, órganos encargados de la toma de decisiones.
“El señor Pradas no es un asesor que se inventan ad hoc, que aparece en un momento determinado, llevaba 20 años trabajando para la entidad, para la Confederación de Cajas de ahorros y para el Banco de España”, ha concluido.
Pradas y Fernández Moreda son dos de los cinco imputados a los que esta semana ha interrogado Moreno, a los que considera “cooperadores necesarios” de estos hechos junto al ex copresidente de NCG y expresidente de Caixa Galicia Mauro Varela; el exvicepresidente de NCG Alfonso Zulueta y Pilar Cibrán, procedente de Caixanova.
Además, el juez mantiene imputados a otros cinco exdirectivos de Novacaixagalicia: su exdirector general, José Luis Pego; el exdirector general adjunto ejecutivo, Javier García de Paredes; uno de los copresidentes, Julio Fernández Gayoso; el exresponsable del Grupo Inmobiliario, Gregorio Gorriarán, y uno de los gestores de la oficina de integración, Óscar Rodríguez Estrada.
La Fiscalía Anticorrupción les acusa de mejorar sus contratos de alta dirección sin conocimiento del Consejo de Administración para “preparar su previsible y futura salida de la entidad”.
Una vez producida ésta, los exdirectivos percibieron cantidades de entre 691.000 euros y 7,7 millones que el Ministerio Público incluye entre las que deberán devolver a NCG Banco.
Para el instructor, los hechos podrían ser constitutivos de un delito de administración desleal o, alternativamente, de apropiación indebida.
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