Las grandes eléctricas, EDPR y Capital Energy, adjudicatarias en la 'megasubasta' de renovables

Economía

26 de enero de 2021 15:31 h

0

La primera macrosubasta de energías renovables organizada bajo el nuevo modelo organizado por el Gobierno se ha cerrado con la adjudicación de 3.043 megavatios (MW) a un precio promedio de 24,47 euros, según anunció la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera. Las grandes eléctricas -Endesa, Iberdrola y Naturgy-, junto a Capital Energy (la gran ganadora), Acciona, X-Elio y EDP Renováveis (EDPR) han sido algunas de las adjudicatarias en la puja.

En su comparecencia en Comisión en el Congreso de los Diputados, Ribera destacó que este precio está un 43% por debajo del estimado a largo plazo y consideró “una buena noticia” que el proceso se haya desarrollado “con normalidad y haya mandado esta señal de precio”. Además, aprovechó para defender el modelo de subastas de renovables diseñado por el actual Gobierno, frente al anterior del PP que se aplicó para las subastas de 2016 y 2017, que “condenaba siempre a mantener precios altos de la electricidad”.

A la subasta han concurrido 84 agentes que han ofertado por 9.700 MW (más de 3 veces la potencia subastada), “reflejo del gran interés por las renovables en España y lo atractivo del nuevo marco normativo”, destaca Transición Ecológica. Han resultado asignados un total de 3.034 MW distribuidos entre 32 agentes, de los cuales 2.036 MW corresponden a la tecnología fotovoltaica y 998 MW a la eólica. Según el ministerio, la instalación de estos 3.034 MW “movilizará inversiones por valor de unos 2.100 millones de euros, ocupando a unos 27.000 trabajadores”.

Capital Energy, que ya fue una de las grandes protagonistas en la subasta de 2017 con la adjudicación de más de 720 MW, se ha hecho con 620 MW eólicos en la subasta. La compañía fundada por Jesús Martín Buezas da así un impulso más a su apuesta por ser un jugador importante en el negocio de las renovables, con una cartera de proyectos en España y Portugal de 30 GW de potencia.

En fotovoltaica, una de las grandes triunfadoras en la subasta ha sido X-Elio. El grupo de renovables dirigido por Lluis Noguera se ha llevado una importante parte con unos 300 MW. Acciona, una de las compañías que participaba en esta subasta después de no haber acudido a las anteriores, se ha adjudicado también 100 MW fotovoltaicos. Asimismo, Greenalia se ha hecho con más de 130 MW e Ignis, con 150 MW.

Por su parte, EDPR y Naturgy han salido también vencedores en la subasta tanto en eólica como en fotovoltaica. En el caso de la filial 'verde' de la portuguesa EDP se ha hecho con algo más de 150 MW, aunque la mayor parte de ellos en solar. La energética presidida por Francisco Reynés, que también fue adjudicataria en la subasta de 2017 y sobre la que este martes se ha anunciado una opa parcial del fondo australiano IFM, se ha hecho con casi 200 MW en fototovoltaica y otros 40 MW en eólica, reafirmando así su apuesta por las renovables en los próximos años.

Las dos grandes eléctricas del país, Endesa e Iberdrola, igualmente figuran entre las adjudicatarias. La energética dirigida por José Bogas se ha hecho con unos 50 MW en fotovoltaica, mientras que Iberdrola, también en solar, se baraja que habría ganado unos 250 MW, también en solar. La puja ha contado con una elevada participación por parte del sector empresarial, resultando adjudicatarios, además, otras actores como la surcoreana Hanwha, Elawan y Enerfin.

Por su parte, no se han adjudicado nada Repsol, que se estrenaba en este proceso, aunque finalmente ha visto como la puja se alejaba de su 'regla de oro' de rentabilidad, y Forestalia, la gran vencedora en las anteriores subastas.

3.000 MW en liza

Con esta puja, el Gobierno recuperaba las subastas de renovables con el objetivo de dar un impulso definitivo al objetivo de despliegue de energías 'verdes' para esta década. La primera de estas nuevas subastas ponía en juego un cupo objetivo de 3.000 megavatios (MW), de los cuales dos tercios están reservados a la fotovoltaica (1.000 MW) y la eólica terrestre (1.000 MW), quedando el resto de potencia a subastar sin restricción tecnológica.

La última de las subastas celebrada en España, en julio de 2017, adjudicó más de 5.000 MW, de los cuales 3.909 MW fueron para instalaciones fotovoltaicas y 1.128 MW para instalaciones eólicas, repartidos entre unas cuarenta empresas.

Junto con los 3.000 MW que se habían concedido en la anterior celebrada en mayo de ese mismo año, se adjudicaron en ese ejercicio más de 8.000 MW de nueva potencia que han alimentado el impulso a las renovables en estos últimos tiempos.

La puja se ha realizado a sobre cerrado y ha adjudicado el producto subastado a las ofertas de menor cuantía hasta alcanzar el cupo establecido. El precio para cada adjudicatario coincide con el precio por el que pujó ('pay-as-bid', por su denominación en inglés).

Estas subastas pretenden convertirse en una herramienta clave para alcanzar los compromisos han sido trasladados al Plan Nacional Integrado de Energía Clima (PNIEC) 2021-2030, que prevé la instalación de en torno a 60 gigavatios (GW) renovables en la próxima década, pero también con el objetivo de maximizar el ahorro para la factura eléctrica.

El plazo máximo de entrega de la energía comprometida será de 12 años para las tecnologías fotovoltaica, solar termoeléctrica, eólica terrestre y marina e hidroeléctrica, y de 15 años para las tecnologías de biomasa, biogás y biolíquidos.

Esta ha sido la primera de las subastas que prevé llevar a cabo el Gobierno hasta 2025, siguiendo un calendario indicativo que indicará los volúmenes mínimos de potencia acumulada para cada tecnología en el periodo y que se actualizará anualmente.

Así, en el próximo lustro se prevé poner en juego un mínimo de casi 20 gigavatios GW mediante estas subastas. La fotovoltaica será la tecnología dominante, con un volumen acumulado mínimo de 10 GW a subastar en los próximos seis años, seguida de la eólica, con unos 8,5 GW; la solar termoeléctrica, con 600 MW; la biomasa, con 380 MW, y otros 60 MW destinados a otras tecnologías como biogás, hidráulica o maremotriz, entre otras.