Con el jefe del eurogrupo, el holandés Dijsselbloem, hubo momentos de tensión y un anuncio claro y tajante: Grecia no colaborará más con la troika. Al día siguiente, el ministro griego de Finanzas, Yanis Varoufakis, viajó a París con un mensaje diferente. Su Gobierno está dispuesto a negociar con las instituciones que forman la troika (UE, BCE y FMI), pero no con los subalternos de menor nivel enviados para controlar las cuentas de los países intervenidos.
Su reunión con el ministro francés Michel Sapin no fue tan dramática. Hubo gestos mutuos de colaboración sin que por otro lado París se alejara mucho de la política oficial de la troika: “Francia descarta una anulación de la deuda, que sería una forma de desplazar la carga del contribuyente griego al contribuyente europeo”, explicó Sapin.
Varoufakis viaja el lunes a Londres, donde se reunirá con el ministro británico de Hacienda, George Osborne.
La actitud de colaboración de Varoufakis quedó patente al asegurar en una entrevista en Le Monde que su Gobierno no actuará unilateralmente, sino que colaborará con sus socios, y aunque justificó el parón en el proceso de privatización, trató de calmar a los inversores. Varoufakis afirmó que están “decididos a colaborar con (sus) socios” y que no actuarán “de forma unilateral”.
Pero insistió en su voluntad de modificar el programa de rescate de Grecia porque se basa en “una lógica errónea”. “Los dos principales errores de los Gobiernos griegos desde hace decenas de años son el recurso constante al endeudamiento sin pensar en el futuro y la ausencia de reformas. Eso lo vamos a parar”, señaló.
La actitud del BCE
Sin responder directamente a qué alternativa tiene a los 7.000 millones de euros del próximo pago previsto por la troika que Atenas debía recibir y que su Gobierno rechaza mientras no se adopte un nuevo plan, indicó que sí esperan encontrar “espacio presupuestario en las próximas semanas”.
Ayer, tras su encuentro con Sapin, había sido más preciso al indicar que confía en que el Banco Central Europeo garantice la liquidez en ese periodo, como ya lo ha hecho con otros países.
La actitud del BCE se ha convertido en uno de los elementos clave en el futuro financiero de Grecia. La ayuda que el BCE concede a los bancos griegos permite asegurar su liquidez y es un seguro de vida en caso de que se agrave el problema de la salida de depósitos. Erki Liikanen, miembro del consejo del BCE y gobernador del banco central finlandés, aseguró este fin de semana que esa ayuda está condicionada a que Grecia continúe respetando los términos del programa de rescate.
Sobre las privatizaciones, Varoufakis comentó que “en medio de una crisis deflacionista no es muy inteligente vender las joyas de la familia por una nimiedad”. Apostó en su lugar por “desarrollar los bienes del Estado para aumentar su valor utilizando medios de financiación inteligentes para reforzar (su) economía”.
En cualquier caso, puntualizó que no dará marcha atrás a las privatizaciones terminadas y, a propósito de la parte del puerto del Pireo que ha pasado a manos de la empresa china Cosco, consideró que sus inversiones “son muy positivas para Grecia”.
De forma más general, consideró que “las inversiones extranjeras, y en particular las chinas”, constituyen “una gran esperanza para mejorar nuestras estructuras y reforzar nuestra competitividad”. “Este Gobierno puede garantizar a los inversores extranjeros que tendrán enfrente espíritus abiertos”, sentenció el ministro.
Francia no cede
El ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, señaló en otra entrevista que el nuevo Gobierno griego puede adoptar las medidas sociales que ha prometido si en paralelo obtiene nuevos ingresos, en particular combatiendo el fraude fiscal, pero no a costa del déficit que financian sus socios europeos. Preguntado en la emisora Europe 1 sobre si van a ser los europeos los que financien el programa del primer ministro griego, Alexis Tsipras, Sapin respondió: “Evidentemente, no”.
Sapin precisó que, si con las medidas sociales lo que ocurriera fuera “aumentar el déficit de Grecia, no sería razonable, no sería posible”.