La Agencia Tributaria ha abierto una inspección a la sociedad española Worldtour SA, propiedad del banquero Jaime Botín y utilizada por el multimillonario para enmascarar a través de empresas extranjeras la propiedad de varios aviones privados y yates de lujo. Entre los activos que gestiona Worldtour a través del paraíso fiscal de Guernsey está el Adix, superyate con el que el tío carnal de la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, trató de sacar hace un año ilegalmente de España un Picasso para su posterior venta en Suiza.
“Con fecha 7 de abril de 2015 se notificó el comienzo de actuaciones inspectoras por el concepto de Impuesto sobre Sociedades e Impuesto sobre el Valor Añadido para los periodos 2011 y 2012”, explica Worldtour en sus cuentas de 2015. La inspección se abrió después de que, en marzo de 2014, Worldtour fuera denunciada ante la Oficina Nacional de Investigación contra el Fraude (ONIF), dependiente de la Agencia Tributaria, por un supuesto fraude fiscal de más de 1,3 millones de euros.
La mayor parte de esa presunta evasión, 1,1 millones, correspondía, según esa denuncia, a la compra por 10,7 millones de dólares de un jet privado en marzo de 2012, uno de los ejercicios que ahora investiga Hacienda. El dinero supuestamente evadido implicaría la comisión de un presunto delito fiscal por ese importe, equivalente al impuesto de matriculación de la aeronave en España, que Botín no pagó.
Worldtour, que no tiene empleados y ha registrado pérdidas en cuatro de los cinco últimos ejercicios, controla un 66,67% de la sociedad de Guernsey Cherokee Bay LTD. A cierre de 2015, esa participación estaba valorada en 25,5 millones de euros, frente a los 13,9 millones de un año antes, según las cuentas de Worldtour.
Cherokee Bay ha sido utilizada durante años por Botín, de 80 años, para ocultar la propiedad de dos yates de lujo y minimizar la factura fiscal por su uso. Una operativa similar a la empleada por otro exbanquero, José María Amusátegui, para ahorrarse el IVA y el Impuesto sobre Determinados Medios de Transporte (equivalente al impuesto de matriculación) de un yate a nombre de otra sociedad de Guernsey, como desveló la investigación de Los Papeles de la Castellana.
Amusátegui se cuidó durante años de entrar en aguas españolas, de las que el superyate de Botín es asiduo. El Adix, que estos días transita por aguas de Nueva Inglaterra (Estados Unidos), tiene su base habitual en el Puerto de Valencia, donde, como reconocieron en la Audiencia Nacional los asesores legales de Botín (representado por el bufete Ramón y Cajal), se encontraba en diciembre de 2012 el cuadro de Picasso Cabeza de mujer joven, que el banquero quería entonces subastar en la casa de subastas Christie's en Londres.
Teniendo en cuenta esta circunstancia, Botín podría estar obligado a rendir cuentas al fisco español por ese yate al ser residente en España, explica un experto en derecho náutico.
“El administrador único de la sociedad considera que se han practicado adecuadamente las liquidaciones de los mencionados impuestos, por lo que, aún en caso de que surgieran discrepancias en la interpretación normativa vigente por el tratamiento fiscal otorgado a las operaciones, los eventuales pasivos resultantes, en caso de materializarse, no afectarían de manera significativa a las cuentas”, dice Worldtour en sus cuentas sobre la inspección de Hacienda.
La administradora única de Worldtour es Rocío Utrera Gómez, abogada vinculada a Bankinter y a varias empresas de Jaime Botín, expresidente y primer accionista de ese banco. Casada en 1996 con un primo de Alberto Ruiz Gallardón, Utrera comparte apellidos con la esposa del exministro de Justicia, expresidente de la Comunidad de Madrid y exalcalde de Madrid. La esposa de Gallardón, Mar Utrera Gómez, es hija de José Utrera Molina, exministro-secretario general del Movimiento en la dictadura franquista.
Rocío Utrera es una de las dos personas a las que la denuncia presentada contra Worldtour ante la ONIF atribuía presuntas “responsabilidades delictivas”. La otra persona es Ricardo Luis Egea Marcos, estrecho colaborador de Jaime Botín que ha estado cuatro décadas en puestos de alta responsabilidad en Bankinter.
Guernsey, Jersey y Panamá
Cherokee Bay está radicada en Guernsey desde el 12 de febrero de 2009. Hasta entonces tenía su domicilio en la cercana isla de Jersey, otro paraíso fiscal. A esa fecha (febrero de 2009) uno de los tres administradores de Cherokee era el propio Jaime Botín, de profesión “banquero retirado”, según el acta de migración depositada en el registro de Guernsey.
Los accionistas de esa sociedad a esa fecha eran Euroshipping Charter Company Inc, radicada en Panamá (territorio que en aquel momento también era considerado un paraíso fiscal por la Hacienda pública española) y la propia Worldtour SA.
El superyate Adix, bautizado en honor a la segunda esposa de Botín, Adela Bermúdez, fue interceptado hace un año en Córcega por el servicio de Aduanas francés cuando intentaba llevar a Suiza el citado cuadro de Picasso, valorado en más de 26 millones de euros, para su posterior subasta, pese a que la obra había sido declarada como no exportable por las autoridades españolas. El caso está en manos de un juzgado de Pozuelo de Alarcón (Madrid), que en octubre pasado imputó a Botín por un posible delito de contrabando de bienes culturales.
El propietario formal del cuadro es la panameña Euroshipping Charter Company Ltd, presidida por Paul Saurel, directivo del Santander vinculado al entramado de sociedades en Panamá e Islas Vírgenes Británicas con el que los Botín ocultaron en Suiza más de 2.000 millones de euros que regularizaron con Hacienda en 2010 a cambio de 211 millones, según Vozpópuli. Esta publicación también vinculó a Euroshipping con el bufete panameño que asesoró al testaferro que participó en la compra del ático del expresidente madrileño Ignacio González en Marbella.
La inspección de Hacienda a Worldtour no es la única abierta en los últimos meses a las empresas de Botín, aspirante a filósofo que en marzo pasado, en su habitual tribuna en El País, arremetía contra el PSOE por incluir “impuestos draconianos” en su programa electoral y alababa el sistema impositivo español, que “ha demostrado su eficacia permitiendo al país salir del agujero en que se encontraba desde la crisis”.
En febrero, Hacienda también abrió inspección a Cartival, la sociedad a través de la cual Botín vehicula su participación en Bankinter. Lo hizo tres semanas después de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) revalidara su sanción contra el banquero tras haberla anulado la Audiencia Nacional. El regulador bursátil impuso a Botín una multa de medio millón de euros por ocultar en Suiza parte de su participación en Bankinter.
En el caso de Cartival, Hacienda investiga los impuestos de Sociedades e IVA para los periodos 2011 a 2014, según informó el mes pasado El Confidencial.