La Inspección de Trabajo provocó la conversión de 193.946 contratos temporales fraudulentos en indefinidos en 2018, más del doble (+108,7%) que el año anterior. El gran aumento se ha debido a la mejora de la actuación ordinaria de la Inspección, pero sobre todo a un plan de choque específico que puso en marcha el Ministerio de Trabajo. El programa consistió en el envío de cartas informativas de la autoridad laboral a una serie de empresas en las que detectaba posibles irregularidades. El resultado, 61.445 conversiones de falsos temporales en fijos, casi el 32% de la cifra total del pasado ejercicio.
La efectividad del plan de choque ha sido muy elevada. Dentro del Plan Director por un Trabajo Digno, el Ministerio de Trabajo lanzó dos planes de choque (contra la contratación temporal y el trabajo a tiempo parcial fraudulentos). En su primera fase, de detección de posibles situaciones irregulares a través de la “herramienta de lucha contra el fraude”, la Inspección de Trabajo envió cartas informativas a las empresas en las que se detectaban posibles fraudes.
Una vez transcurrido un mes desde el envío de las comunicaciones para que las empresas regularizaran los contratos o justificaran su validez, tenía lugar la segunda fase del plan en la que la Inspección comprobaba la información enviada por las empresas.
El balance final del plan de choque para las contrataciones temporales ha sido de 61.445 tranformaciones de contratos temporales en fijos, lo que supone “el 76,3%” de los trabajadores afectados por el plan, según las cifras difundidas por el Ministerio de Trabajo. Es decir, casi 8 de cada 10 trabajadores que fueron objetivo del programa de la Inspección logró la estabilización en su puesto de trabajo.
A esas 61.445 conversiones hay que sumar 132.501 transformaciones de falsos temporales en fijos fruto de la actuación habitual de la Inspección de Trabajo. En su labor ordinaria, la autoridad laboral también mejora resultados, con un aumento de las conversiones del 42,6%.
“Estas cifras suponen las mejores alcanzadas por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en sus actuaciones en materia de lucha contra el fraude en la contratación temporal”, apuntan desde el Ministerio dirigido por Magdalena Valerio.
31.517 ampliaciones de jornada
El plan de choque del Ministerio fue mucho menos efectivo en el caso de la parcialidad abusiva. Las cartas informativas y la actuación inspectora lograron aumentar la jornada de 8.824 contratos parciales irregulares, lo que supone el 17,5% de los trabajadores afectados por el programa. Menos de dos de cada 10 empleados bajo la lupa de la Inspección mejoró su situación en este caso.
Aun así, esos 8.824 incrementos de jornada se deben sumar a las 22.693 prolongaciones gracias a la labor ordinaria de la Inspección, lo que supuso que el año pasado las ampliaciones alcanzaran los 31.517 contratos. De nuevo, “el mejor dato histórico en esta materia”, destaca Trabajo, un 48,2% más respecto a los resultados obtenidos en 2017.
La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha afirmado con anterioridad que los abusos de las empresas en la parcialidad de la jornada son complejos de probar por parte de la Inspección y ha apostado por la registro obligatorio de la jornada laboral para dar más herramientas a los inspectores en esta materia.