Después de divagar en un mar de dudas durante los dos primeros años de la legislatura, la contundente presión desde el Ministerio de Fomento parece haber decidido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a rematar su primer mandato con el saldo de las escasas piezas valiosas que quedan en el patrimonio público empresarial español.
En las últimas semanas, la ministra Ana Pastor ha pisado el acelerador y ha puesto en marcha la venta del 49% de la empresa estatal de aeropuertos Aena. Además, ha impulsado medidas prácticas y legales para proceder a la liberalización del transporte ferroviario de pasajeros con la irrupción de un competidor privado en el histórico monopolio de Renfe.
Coincidiendo como este nuevo afán liquidador, Acciona, uno de los grupos empresariales más activos en las operaciones de trasvase de activos públicos a manos privadas de las últimas décadas, ha anunciado la puesta en venta del que en su día fuera el buque insignia del transporte naviero gestionado desde la Administración: Transmediterránea. Desde su privatización en 2002, la naviera ha estado en manos de la familia Entrecanales.
1984, primera privatización
El pasado mes de julio se cumplió el 30 aniversario de la aprobación por un Gobierno de Felipe González en 1984 de la primera venta de una empresa pública del período democrático: Textil Tarazona.
La información oficial de los Ejecutivos que las promovieron divide el festival privatizador de estas tres décadas en dos grandes oleadas: desde 1984 a 1996, y desde 1997 a 2007. En este lapso se produjeron 133 operaciones que coinciden con la venta de unas 120 empresas ya que en algunos casos las desinversiones se produjeron en varios tramos de capital.
Traducidos a euros, los ingresos obtenidos por Estado sumaron 13.200 millones en la primera oleada y 30.000 en la segunda. En total unos 43.200 millones.
eldiario.es ha querido averiguar si la venta masiva de empresas públicas, con el tiempo, ha cumplido los objetivos que se plantearon en junio de 1966 cuando se lanzó la segunda y más agresiva de las oleadas de privatizaciones.
Entonces se difundió un denominado Programa de Modernización del Sector Público Empresarial que planteaba un doble fin para la enajenación de activos: “reducir el endeudamiento del Estado”, y “crear un potente sector empresarial e industrial con capital español y proyección internacional”.
El resultado de la búsqueda y seguimiento de la evolución de las empresas privatizadas en Internet desde que salieron de la propiedad del Estado ofrece resultados esclarecedores. Podemos agrupar las 120 empresas estatales vendidas en diferentes modelos teniendo en cuenta cual ha sido la evolución posterior y la suerte que han corrido en su nueva condición privada.
Primer modelo
Son compañías que se vendieron a empresarios que, con el tiempo, las llevaron a la quiebra y a largos y complejos procesos judiciales.
Marsans. Su origen fue la primera agencia de viajes española creada en 1910. Es privatizada en 1985. Tras una sonora peripecia de un cuarto de siglo vinculada a los empresarios Gonzalo Pascual y Gerardo Díaz Ferrán, quiebra en 2010. El caso está hoy en los tribunales.
Pamesa. Industria del papel. Privatizada en 1986, es comprada por Torras Hostench. Esta firma, vinculada al Grupo Kio, protagonizó un gran escándalo pocos años más tarde, quebró y, tras un largo proceso judicial, desapareció.
Babcock. Bienes de equipo. Se privatiza en 2001 y la compra la alemana Babcock Borsig. Antes de su venta, el Estado español gasta en su reestructuración 121.000 millones pesetas (unos 751 millones de euros). En 2011, las condiciones de enajenación y los incumplimientos de los compromisos pactados, llegan al Tribunal Supremo.
Segundo modelo
Las empresas públicas fueron vendidas directamente a grupos extranjeros o con mayoría de capital exterior. Solo en contados casos conservaron su marca.
Telesincro, dedicada a bienes de equipo. Privatizada en 1986, se integra en Bull Francia.
Seat. Fundada en 1950, fue privatizada en 1986 y pertenece el Grupo Volkswagen.
Secoinsa. Empresa de tecnologías de la información creada en 1975 por Telefónica, el Instituto Nacional de Industria (INI) y Fujitsu. Privatizada en 1986, al poco se convierte en una filial de Fujitsu.
Ateinsa: Agrupaba activos públicos dedicados a la fabricación de trenes. En 1989 se vende a Alstom en el marco de la operación de lanzamiento de la primera línea del tren de alta velocidad en España.
Enasa fue fundada por el INI en 1946 sobre los activos de automóviles de Hispano-Suiza. En 1990 es vendida a la multinacional Iveco.
Enatcar. Empresa pública de autobuses de línea, privatizada en 1999 y comprada por la compañía de la familia Cosmen. En 2005 Alsa fue vendida al grupo británico National Express.
Santa Bárbara. Armamento. Creada en 1960, privatizada en 2001; desde 2006 es propiedad de la estadounidense General Dynamics.
Tabacalera. Creada en 1636, es privatizada en 1999. En 2008 cae en manos de la británica Imperial Tobacco. Su último presidente fue Antonio Vázquez que después sería también una pieza clave en la venta de Iberia a IAG.
Tercer modelo
Un número muy elevado de compañías ofrecen su última aparición en los medios de comunicación precisamente el día que fueron privatizadas. Otras tardaron muy poco en desaparecer. De algunas sobrevive el nombre, pero nada tienen que ver con las compañías que un día fueron públicas.
Aldeasa. Distribución. Creada en 1974 y privatizada en 1997. Se integra en la italiana Auto Grill y desparece en 2011.
Artespaña. Artesanía, privatizada en 1994. Desaparecida.
Entursa. Creada en 1963 como agrupación de activos turísticos del Estado. Es privatizada en 1986 y sus activos van a parar a cadenas hoteleras nacionales y a un consorcio italiano.
Trasatlántica, naviera creada en 1849 con una gran trayectoria. Fue nacionalizada durante el franquismo. Privatizada en 1994, nunca ha vuelto a brillar.
Fabrica San Carlos. (Astilleros, privatizados en 1993). Sodical (Empresa de promoción industrial, privatizada en 1997). Surgiclinic Plus (Medicina, privatizada en 1997). Icsa (Materiales compuestos, privatizada en 1999).
Cuarto modelo
Una formula muy común en la enajenación entre las grandes compañías públicas fue la privatización mediante la venta a unos denominados “núcleos duros” de accionistas. Estos nuevos propietarios eran grupos empresariales vinculados a las grandes fortunas españolas, o a los grandes bancos o, también, empresas privatizadas con anterioridad. Con el paso del tiempo se ha podido comprobar que, en muchos casos, se trataba de simples testaferros de algún grupo internacional que, finalmente, se hizo con la propiedad. Los núcleos duros más célebres fueron los de Iberia (Caja Madrid, Logista, BBVA, Ahorro Corporación), Telefónica (Argentaria, BBVA, La Caixa) y Endesa (Santander y BCH).
Iberia. Sale a Bolsa en 2001 y cae en manos privadas con la conformación de un ‘núcleo duro’ con Caja Madrid, Logista, BBVA y El Corte Inglés. Se fusiona con British Airways y entra en IAG en 2011. En 2013 deja de tener propietarios españoles con la salida apresurada de Bankia.
Endesa. Electricidad. Fundada en 1944. Privatizada por el INI en 1988 mediante una OPV. En 2005 es protagonista de un gran ‘rifirafe’ por su control en el que interviene el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Gas Natural, la alemana Eon, el Grupo Acciona y, finalmente, la italiana Enel, que se la queda.
Repsol. Creada en 1987 con activos energéticos públicos. Se privatizó en 1989 mediante una OPV. En 1991 compra Gas Natural.
Gas Natural creada en 1843 vivió durante años como Catalana de Gas. Integrada en el Instituto Nacional de Hidrocarburos y reestructurada en la segunda mitad del siglo XX, en 1991 es comprada por Repsol.
Enagás. Transporte de gas. Creada en 1972 y vendida a Gas Natural en 1994.
Quinto modelo
La compañía privatizada se incorpora como activo a la estructura de grupos empresariales de las grandes fortunas españolas y empresarios afines al Gobierno.
Trasmediterránea. Privatiza en julio de 2002, se adjudica a un consorcio liderado por Acciona, en el que también participaba el grupo de empresas turísticas del exministro del Partido Popular Abel Matutes. El precio pagado es de 482 millones, incluida la deuda. Ahora la naviera ha vuelto a ser puesta en venta por sus propietarios, la familia Entrecanales.
Auxini. Industria. En 1997 es privatizada y se integra en el grupo ACS con el nombre de Actividades de Construcción y Servicios.
Musini. Seguros. Se privatiza en julio de 2003 y la compra Mapfre.
Empresa Nacional de Autopistas. En 1984 el Estado asumió las pérdidas de seis autopistas de peaje que estaban en quiebra. En 2003 las volvió a privatizar y se las adjudico Sacyr.
Sexto modelo
Hay algunos casos en los que los mismos directivos de la empresa pública, (impuestos por el poder político de turno), han capitaneado el proceso privatizador y, después, se han quedado con la dirección y control de la privatizada.
Argentaria. Creada en 1991 con la unión de activos bancarios públicos. Entre 1993 y 1998 fue privatizada. En 1999, su presidente Francisco González se hace con la presidencia del BBVA capitaneando la fusión de la antigua banca pública y la banca tradicional vasca.
Telefónica. La que ha llegado a ser una de las mayores multinacionales de las telecomunicaciones fue una empresa de mayoría privada desde su nacimiento en 1924. El Estado tenía, no obstante, su control con un 5% del capital y con el 100% de la filial Telefónica Internacional, que fueron privatizados en 1997. Esta participación permitió que Juan Villalonga, amigo íntimo de José María Aznar, fuera el presidente bisagra de la compañía en su pase del control público al privado. Papel que luego heredó Cesar Alierta.
Séptimo modelo
Compañías que tras su privatización se mantienen en la actividad inicial y logran salir adelante.
Ibermatica: Informática creada en 1973. Privatizada en 1993, es vendida a inversiones españoles: Kutxabank, Proa Capital y ONCE. Sigue en activo.
Indra. Tecnológica creada en 1992 con la fusión de Inisel y Ceselsa. En 1994 se vende a Thomson una participación. En 1999 se lanza una OPV para dar salida al capital público. En verano de 2013 Indra es parcialmente reestatalizada con la compra por la Sepi del 20% de las acciones que estaban en manos de Bankia.