Las plataformas digitales de reparto que utilizan autónomos, falsos autónomos según la Inspección de Trabajo y la mayoría de tribunales, están moviendo ficha ante lo que puede ser el fin de su modelo de negocio. La patronal Adigital en la que se encuentran empresas como Glovo y Deliveroo ha difundido unas proyecciones con cuantiosas pérdidas en el sector si estas multinacionales tuvieran que contratar a sus mensajeros, como les exige la ley en estos momentos –según una importante sentencia del Supremo sobre Glovo– y como pretende regular el Gobierno mediante una nueva legislación. Esta debacle económica contrasta con las cifras de negocio distribuidas también este lunes por la empresa Just Eat, la única de las grandes plataformas de reparto que utiliza mensajeros con contrato laboral. No solo logra beneficios, al contrario que sus competidoras, sino que además los incrementó el pasado año.
Los augurios de pérdidas de las multinacionales de reparto como Glovo coinciden con el inicio de la negociación del Ministerio de Trabajo con los sindicatos y la patronal para regular el trabajo en las plataformas digitales, que finalmente será más amplia de lo esperado y no afectará solo a los llamados 'riders' o repartidores a domicilio. La patronal Adigital a la que están asociadas estas empresas (y también Just Eat) ha difundido este lunes un 'Análisis del impacto económico de la laboralización de repartidores' en el que advierten de “la destrucción de 300 millones de euros” para el sector de delivery (reparto a domicilio) en España y una “pérdida de trabajo del 77% de los repartidores (1.000 personas)”, entre otras cifras.
Adigital explica que estas predicciones se basan en “la experiencia de Ginebra (Suiza), donde se ha prohibido a los repartidores de Uber Eats operar como trabajadores autónomos”. Siguiendo este ejemplo, la patronal asegura que ha “extrapolado a España” varias situaciones, como la pérdida de empleo y la reducción del negocio, “teniendo en cuenta el tamaño de los dos mercados”. Otro de los datos difundidos da cuenta de una pérdida de “más de 250 millones de euros de ingresos adicionales” para los restaurantes.
Just Eat: suma beneficios con trabajadores
Los malos presagios de Adigital se deben en exclusiva a la implantación del modelo laboral en estas empresas de reparto que se alimentan de autónomos. Más allá de la obligación de las compañías de cumplir siempre la legislación laboral, sea más o menos rentable para sus cuentas de resultados y las de los restaurantes, el único ejemplo entre las grandes multinacionales de reparto que utiliza mensajeros con contrato laboral contrasta mucho con este panorama catastrófico.
Mientras que Glovo, Deliveroo y Uber Eats registran pérdidas, aunque aumentan sus ventas, Just Eat obtiene beneficios y estas iban en aumento hasta el año pasado, antes de la pandemia. La compañía ha informado este lunes de que ha depositado sus cuentas de 2019 en el Registro Mercantil “presentando unos ingresos netos que superan los 44 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 16%”. Además, de los ingresos, aumentan los beneficios. “Just Eat España alcanzó más de 6 millones de euros de beneficio, lo que supone un incremento del 41% respecto al ejercicio anterior”, desglosa la multinacional.
En Just Eat explican que el crecimiento de la compañía “responde al aumento del número de clientes y de pedidos registrados por Just Eat en 2019, impulsado por la gran oferta de restaurantes adheridos a la plataforma (más de 13.000 en España) y a su amplia presencia en todo el territorio español en más de 1.700 municipios”. La multinacional también destaca cómo han demostrado otra manera de hacer las cosas en el terreno laboral frente a sus competidoras. “Para nosotros son muy importantes los resultados financieros, pero también lo es el cumplir con el marco regulatorio y, en concreto, con la normativa laboral”, subraya en un comunicado el Director financiero de Just Eat España, Ramón Argelaguet Vilaseca.
La multinacional asegura que todos los repartidores que entregan sus pedidos tienen contrato laboral. La empresa “trabaja principalmente con restaurantes que tienen sus propios repartidores y, en el caso de los restaurantes que no disponen de servicio de reparto propio, Just Eat les ofrece la posibilidad de gestionar los repartos a través de empresas externas”, explicaban en la compañía hace unos meses a este medio. Una de estas empresas subcontratadas que abastece de mensajeros es, por ejemplo, MissionBox. Fuentes de Just Eat precisan que “todas estas empresas nos comparten cada tres meses los justificantes de las contribuciones a la Seguridad Social de sus repartidores, los cuales son todos empleados”.
En opinión de Just Eat, “el sector del delivery continuará creciendo de manera saludable con independencia de las empresas que operen en el mismo”. Fuentes de la multinacional subrayan el hecho de que actualmente muchas de estas plataformas no sean rentables ni aun evitando los costes laborales de sus repartidores: “En muchos casos la obtención de cuota de mercado a toda costa ha primado sobre otros elementos como pueden ser la rentabilidad o el hecho de mantenerse fuera de la zona gris de la normativa laboral en España”.
Intereses encontrados de las empresas
La negociación de una nueva regulación sobre el trabajo en plataformas digitales está dejando en evidencia las diferencias en el terreno empresarial. En la mesa de diálogo social, la representante de las empresas son las patronales CEOE y Cepyme, pero dentro de ellas hay compañías similares que utilizan distintos modelos laborales. Como Just Eat y Deliveroo, por ejemplo, empresas de reparto de comida a domicilio que se basan en un modelo laboral y uno de autónomos, respectivamente. Pero también otras compañías como Telepizza, que ha basado parte de su marca en el reparto a domicilio, que realiza con trabajadores en plantilla.
En Just Eat celebran por ejemplo que el Gobierno vaya a revisar el marco laboral en favor de la laboralidad, que evite “desventajas competitivas” entre las empresas del sector. La multinacional señala además de manera indirecta a sus competidoras al destacar que “la falta de claridad jurídica está redundando en una precariedad laboral entre los repartidores” que en su opinión impacta “negativamente” en la imagen del conjunto del sector. “En torno a la economía digital se ha creado un falso dilema entre innovación y calidad del mercado laboral. No es cierto que la precariedad laboral sea intrínseca a la innovación”, zanjan.
Adigital ha difundido este lunes que las plataformas Deliveroo, Glovo, Stuart y Uber Eats “valoran muy positivamente la creación del grupo de trabajo de plataformas digitales, impulsado por la CEOE, que ha empezado a trabajar con sus asociados para defender la necesidad de encontrar soluciones que preserven la flexibilidad y competitividad del mercado laboral y, al mismo tiempo, garanticen mayores derechos y protecciones”. En la patronal digital siguen apostando por una fórmula intermedia entre el trabajador autónomo y el asalariado, que rechazan con rotundidad tanto el Ministerio de Trabajo como los sindicatos.
Una de las incógnitas pasa por qué postura defenderá la CEOE en la mesa de negociación. Fuentes de la patronal responden a este medio que “se está consultando a todas las partes interesadas dado que el marco se ha ampliado a todas las plataformas digitales, no solo a los de reparto”. Este miércoles, el Ministerio de Trabajo vuelve a reunirse con los agentes sociales para abordar esta futura legislación, encuentro en el que se espera que todas las partes acudan con propuestas.