Manuela Carmena ha solicitado a Bankia una reunión y se verá con el presidente, José Ignacio Goirigolzarri, la próxima semana. La reunión se enmarca en la ronda de citas que está estableciendo la candidata a regir la Villa de Madrid para poner los mimbres a una de las medidas que corre más urgencia a la líder de Ahora Madrid: un parque de viviendas disponible para realojar a las familias que se queden sin su casa. Desde la formación aseguran que es solo una primera toma de contacto y que el objetivo es abordar con la entidad la situación del parque de viviendas vacías que actualmente tiene Bankia y “explorar vías” para darles salida a través del alquiler social.
Al día siguiente de las elecciones, Carmena se reunió con magistrados para proponer soluciones al problema de los desahucios que pasan, en primer lugar, por una Oficina de Intermediación Hipotecaria que cuente con un seguimiento de las ejecuciones hipotecarias y que tenga preparada una solución habitacional para las familias desahuciadas que no tengan alternativas. Por el momento, solo se le explicará a Bankia, la entidad más representativa de Madrid por ser la heredera de Caja Madrid, el funcionamiento de esta Oficina y no se tratará el tema de las sanciones ni otras medidas coercitivas que la agrupación baraja para que los bancos liberen pisos vacíos.
Durante la precampaña electoral, Carmena solicitó a Bankia tener un derecho de tanteo (o compra preferente) sobre los pisos que la entidad financiera de control estatal tuviera en la villa de Madrid. Bankia intenta deshacerse de al menos 38.500 viviendas repartidas en toda España dentro de la operación Big-Bang, en la que el banco pretende desprenderse de todo el suelo y ladrillo. Con casi toda seguridad, algún fondo buitre o fondo de inversión se hará con estas viviendas, y Carmena quería optar a su compra al mismo precio.
Sin embargo, el equipo de Carmena ha reculado en parte de este propósito hasta que conozcan las cuentas del Ayuntamiento y sepan si será posible hacerse con estos pisos. Por eso la futura alcaldesa quiere negociar con la entidad financiera la posibilidad de que parte de estas viviendas se pongan como alquiler social.
Ahora Madrid lleva en su programa cobrar a la banca por el uso de cajeros automáticos y también están estudiando posibles sanciones para los bancos con viviendas vacías al estilo de la ordenanza que ya existe en Barcelona.