Hay vida entre las operadoras de telecomunicaciones más allá de la televisión y el fútbol. Pese a que ha sido el servicio que ha centrado la batalla comercial entre las tres grandes operadoras, un importante número de hogares no busca contar con televisión de pago, que tiende a encarecer la factura. Es en ese contexto en el que está creciendo el cuarto operador, MásMóvil.
El grupo está ganando cuota de mercado en los servicios de banda ancha fija, como la fibra, que suelen ir ligados en su comercialización a los de telefonía fija y también a los de televisión. Pero MásMóvil aunque ofrece servicio de televisión, no ha entrado en la misma batalla que las grandes operadoras..
Así, el cuarto operador ha pasado en apenas dos años de 120.000 líneas de banda ancha fija a 848.000, según figura en las estadísticas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), publicadas el jueves y que hacen referencia al tercer trimestre del pasado año.
Se trató de un trimestre, el del verano, muy marcado por la batalla comercial vivida entre Telefónica, Vodafone y Orange por captar clientes a través del fútbol o, en el caso de la británica, de no perderlos pese a haber decidido no emitir el deporte rey. Sin embargo, en ese mismo contexto, MásMóvil, sin servicio de televisión, entró en casi 100.000 hogares más, una ganancia mayor a la de Telefónica, que fue de 73.000.
La empresa ha seguido ganando cuota de mercado en este negocio pese a no contar con los servicios audiovisuales, mostrando que hay clientes que, ante la subida de precios que supone la televisión de pago, optan por alternativas más económicas. Está ya presente en casi el 6% de los hogares, y las tres grandes operadoras acumulan su cuota más baja histórica, por debajo del 90% –Telefónica el 40%, Orange el 26% y Vodafone el 21%–.
MásMóvil informó a comienzos de este mes que cerró 2018 con un millón de clientes de banda ancha fija. De este modo, ha llevado a la banda ancha fija el éxito que ha ido cosechando también en móviles, donde cuenta con casi seis millones de clientes. El modelo es similar: competir en precio frente a los operadores que han mejorado sus ingresos gracias a los paquetes que suman servicios a cambio de mensualidades más altas.
Tal es la relevancia que está tomando también el nicho de clientes que no tienen televisiones, que tanto Vodafone como Telefónica lanzaron el pasado año dos nuevas marcas, Bit y O2, respectivamente. Con ellas, que cuentan únicamente con dos tarifas (solo móvil o móvil y fibra) entran a competir precisamente en los dos negocios donde MásMóvil está ganando cuota de mercado frente a las grandes.
Telefónica gana en televisión de pago
Los datos de la CNMC vienen a mostrar lo que ya se preveía. Telefónica ganó la batalla del fútbol. La empresa española cerró el tercer trimestre con 4,1 millones de hogares con televisión de pago, una ganancia de más de 200.000 clientes respecto al segundo trimestre del año. Alcanzó el 60% de cuota de mercado, dos puntos más que un año antes en ese mismo periodo.
Respecto a sus competidores, Orange, que también apostó por el fútbol, ganó en verano 53.000 abonados a su televisión de pago, hasta los 667.000 clientes. En el lado opuesto se situó Vodafone, con una pérdida de 68.000 clientes, hasta los 1,2 millones. La empresa británica, inmersa en un ERE que afectará a casi la cuarta parte de la plantilla, ya había avanzado sus datos durante el trimestre, aunque avanzó que en el último mes de 2018 recuperó la senda al alza en la ganancia de clientes de televisión.
Sin embargo, la batalla de precios para captar clientes que se vivió durante los meses de verano se tradujo en un freno a los ingresos del servicio de televisión. Así, en el tercer trimestre las operadoras ingresaron 511 millones de euros, el dato trimestral más bajo en más de dos años.