Con el acuerdo social de pensiones aún caliente, firmado este lunes, el ministro de la Seguridad Social ha adelantado esta mañana parte de sus planes para el próximo elemento de negociación que abordará el Gobierno con los agentes sociales: el llamado 'índice de equidad intergeneracional'. Este mecanismo, que sustituirá el factor de sostenibilidad del PP y aún está por debatir, supondrá un “ajuste moderado” para la jubilación de la generación del baby boom, aquellos nacidos entre mediados de los 50 y de los 70, ha afirmado José Luis Escrivá en una entrevista en TVE.
Escrivá ha explicado que la intención del Ejecutivo consiste en que la generación del baby boom, mucho más numerosa respecto a la generación que le sucede, “asuma algo del esfuerzo que hay que hacer durante un periodo del tiempo” en el sistema público de pensiones.
Hasta el 2048 se espera este 'pico' de pensionistas, con una generación de trabajadores menos numerosa, pero después esta “tensión demográfica” del sistema desaparece. El responsable de la Seguridad Social ha precisado que España no tiene un “problema agudo de pensiones”, por lo que considera que solo será necesario un “ajuste moderado”.
Elegir entre un “ajuste” o trabajar “algo más”
El ministro de la Seguridad Social ha explicado que la idea de su Ministerio, que aún no ha concretado ni se ha comenzado a negociar con los empresarios y sindicatos, supondrá aplicar “un ajuste bastante moderado” sobre la generación pensionista del baby boom.
A preguntas de TVE sobre si esto significará una “merma” en la pensión de los afectados por el índice, Escrivá ha respondido que no necesariamente. “Podrán elegir probablemente entre distintas opciones. Una puede ser un pequeño ajuste en su pensión, que sería muy moderado, o alternativamente podrían trabajar algo más. Tenemos todavía que concretar”, ha respondido.
El ministro ha respondido también sobre el siguiente bloque de la reforma de pensiones, pensada para 2022. Escrivá ha apuntado que la extensión del periodo de cálculo de la pensión prometida en Bruselas dentro del Plan de Recuperación irá siempre acompañada de la posibilidad de elección de descarte de algunos años. El ministro ha apuntado que esta reforma pretende “tener en cuenta nuevas carreras profesionales en las que los últimos años no son los mejores, como ocurría antes”.
Un elemento todavía por negociar
Los líderes sindicales y patronales han asistido este jueves a Moncloa a la firma del acuerdo en pensiones del primer bloque de la reforma con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto que ha contado con la presencia de las vicepresidentas del Ejecutivo, entre otros altos cargos.
A preguntas de los medios, Unai Sordo (CCOO) y Pepe Álvarez (UGT) han recordado que el índice de equidad generacional aún no se ha empezado a negociar en la mesa de diálogo social y han preferido centrarse en el pacto ya alcanzado, que recupera la revalorización de las pensiones según el IPC, entre otras medidas.
Sordo ha advertido de que España debe decidir si quiere mantener pensiones equivalentes a las actuales para los futuros pensionistas asumiendo durante unos años más gasto, en línea con lo que ahora soportan otros países, como Francia e Italia. “Los sindicatos pensamos que sí”, ha defendido el líder de CCOO.
Los empresarios por su parte, con el presidente de CEOE a la cabeza, han defendido la necesidad de mantener algún “factor de sostenibilidad” en las pensiones. Si no es el actual de la legislación del PP, que queda derogado en este proyecto de ley, otro, pero que cumpla con la función de afrontar el reto demográfico en el sistema de pensiones en los próximos años, ha defendido Antonio Garamendi.
Sin embargo, las patronales han criticado esta tarde con un comunicado las declaraciones de Escrivá. “CEOE y CEPYME quieren aclarar que dicha pretensión no forma parte del acuerdo alcanzado ni se comparte”. “La definición del nuevo factor de sostenibilidad, en sustitución del actual, que ha quedado supeditada a una futura negociación, debe sustentarse en la equidad y la solidaridad intergeneracional evitando, en todo caso, que recaiga solo sobre algunas generaciones la sostenibilidad del sistema”, zanjan los empresarios.