Washington, 7 mar (EFE).- El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell, insistió este martes en la necesidad de que el Congreso del país suba el techo de la deuda para evitar consecuencias catastróficas para la economía nacional.
“El Congreso realmente necesita elevar el techo de deuda. Si no lo hacemos, creo que las consecuencias son difíciles de estimar, pero podrían ser extraordinariamente adversas y causar daños duraderos”, apuntó el presidente del regulador en una comparecencia ante el Comité Bancario del Senado Powell ofreció su testimonio ante los legisladores, como tiene que hacer por mandato cada seis meses, para hablar sobre la política monetaria seguida por la Fed. Este miércoles hablará ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara Baja.
Aunque en su discurso inicial se limitó a hablar de la Reserva Federal y las ocho subidas de tipos que ha llevado a cabo en el último año para bajar la inflación, Powell se refirió al problema de la deuda en el turno de preguntas de los senadores.
Todo ello, matizó, pese a su deber de no involucrarse “en temas políticos”: “Al final del día, solo hay una solución para este problema, y esa está en el Congreso”, dijo el presidente de la Fed.
Elevar el techo de deuda, añadió, es algo “que ha funcionado en el pasado y que debe funcionar esta vez”.
Sin visos de acuerdo alguno, republicanos y demócratas están discutiendo sobre el límite del techo de deuda, la cantidad total de dinero que el Gobierno federal está autorizado a pedir prestado para cumplir con sus obligaciones legales existentes. En la actualidad es de 31,4 billones y fue alcanzado el 19 de enero.
Los conservadores tienen el control de la Cámara de Representantes tras lograr la mayoría en las elecciones de medio mandato de noviembre pasado y quieren aprovechar ese cambio de tornas para forzar concesiones por parte de la Administración de Joe Biden.
Según datos de la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, en inglés), la deuda pública de Estados Unidos se elevará hasta el 118 % del Producto Interior Bruto (PIB) en 2033, su mayor nivel registrado, y seguirá al alza si no hay cambios legislativos.
Así, la deuda federal pasará del 98 % este 2023 a ese 118 % al final de la década, lo que supone un incremento medio de dos puntos porcentuales al año.