El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Álvaro López Barceló, ha adelantado que Sareb va a lanzar este mes uno de sus principales proyectos de vivienda en alquiler asequible. El FROB, el fondo a través del que el Estado dirigió el rescate de las antiguas cajas de ahorro, es el primer accionista de la Sareb, el 'banco malo' que aglutinó los activos inmobiliarios fallidos de la banca y de la que tiene más del 50% del capital.
Un porcentaje de control que es esencial para determinar la estrategia de Sareb, que tiene por delante dos años clave para dar salida a sus activos, porque en noviembre de 2027, si no se amplía su mandato, tendría que entrar en liquidación.
López Barceló ha comparecido en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados y no ha entrado a valorar si se ampliará la vida de Sareb más allá de noviembre de 2027, pero sí ha dado detalles sobre su estrategia en vivienda social y asequible. Es ahí donde entra en juego el denominado Proyecto Viena, que pasa por ampliar el parque público de vivienda.
“Sareb guarda una vinculación con el mercado de la vivienda, es evidente, dada su tipología de activos”, ha reconocido López Barceló. “De ahí la importancia de sus actuaciones. El proyecto Viena está por lanzarse en este mes de octubre para recabar ofertas de inversores terceros para derecho de superficie de viviendas que se lanzarán en alquiler asequible un 20% por debajo del precio del mercado”, ha adelantado. “Viena en esta primera fase en octubre. Se van a poner en marcha la construcción de 3.770 viviendas, lo que supone 460 millones de euros de inversión”. Esa cifra, progresivamente, llegará hasta las 15.000 viviendas y “los alquileres tendrán un carácter asequible, por debajo de la media del mercado”, ha incidido.
La dirección de Sareb aprobó el Proyecto Viena en julio. Este pasa por la construcción inicial de más de 10.600 viviendas sobre suelos propiedad de Sareb, que serán posteriormente gestionados en régimen de alquiler asequible y que pueden ampliarse hasta las 15.000 que ha dicho el responsable del FROB.
Según detalló Sareb, el proyecto se va a llevar a cabo en diversas fases. En la primera, es donde se ubican los concursos para seleccionar inversores a los que el 'banco malo' cederá el uso de un total de 133 suelos finalistas, mediante un derecho de superficie a largo plazo, para la promoción de vivienda en régimen de alquiler asequible.
“Al término de esta cesión, las viviendas revertirán gratuitamente a la entidad pública titular de los suelos. Los precios de los alquileres serán asequibles para rentas medias y se establecerán en coordinación con el Ministerio de Vivienda”, indicó la sociedad en julio. En ese proyecto, se contrató a la consultora PWC para identificar las poblaciones donde existe demanda de alquiler asequible y la selección de los suelos que conforman esta iniciativa.
El responsable del FROB también ha reconocido que Sareb, a la que le quedan 30.000 millones de deuda por devolver, no va a ser capaz de poner a cero su cuenta con el Estado. Al presentar resultados la compañía ya reconoció que, con los números de los últimos años y el plan de negocio que tiene sobre la mesa, si cierra en 2027 como está previsto le podrían quedar más de 14.000 millones de euros por devolver. “No les puedo hacer una proyección, cuando mayor es la actividad vendedora, hay ingresos pero afloran las minusvalías por el precio de los activos. Eso existe y da lugar a las cifras”, ha asumido en el Congreso de los Diputados.
Cómodos con la posición en Caixabank
Mientras en Sareb no salen las cifras, el responsable del FROB ha reconocido que la situación es la contraria en Caixabank, donde el Estado tiene el 17% del accionariado. En principio, el FROB –a través de BFA– tiene que ir liquidando su participación a finales de 2025, pero ha dejado la puerta abierta a que se amplíen los plazos “como se ha hecho en varias ocasiones desde 2017”, con el objetivo de maximizar el valor de la participación.
“Caixabank se ha revalorizado un 50% en el último año y un 250% desde la fusión”, con Bankia. “Desinvertir [antes] hubiera supuesto menores ingresos y menor recuperación de ayudas públicas”. De ahí, ha apuntado, la necesidad de valorar el potencial al alza de la acción, el valor de la entidad, la capacidad de absorción de la demanda, la perspectiva de cobro de dividendos y la volatilidad del mercado en cada momento, ha enumerado. “El consenso de los analistas percibe potencial al alza del 25% de la acción y recomiendan a cualquier inversión o accionista mantener la acción o incrementar la exposición”, ha justificado. Ese es el “motivo por el que el FROB ha decidido no acometer ventas, aportamos estabilidad accionarial, no intervenimos en la gestión, no hay intervención en el día a día y tenemos plena confianza en el equipo gestor”, ha justificado.
“En noviembre”, ha incidido, Caixabank tiene previsto presentar su plan estratégico para los ejercicios 2025 a 2027 y “los resultados, el potencial al alza que aprecian los analistas, el equipo directivo y la coyuntura económica nos hace confiar en que los datos seguirán siendo positivos”.
En ese sentido, ha recordado que el FROB ha recibido 800 millones de dividendos a través de BFA y que cerró el año 2023 con un resultado positivo de 456 millones de euros.