El Gobierno ha vuelto a congelar la partida destinada para gastos reservados, que en 2016 se sitúa de nuevo en los 26,86 millones de euros, sin variar la distribución de los fondos asignados a cada uno de los cuatro Ministerios que los manejan: Presidencia (por tener bajo su control al Centro Nacional de Inteligencia), Defensa, Interior y Asuntos Exteriores.
El 73,7 por ciento de estos fondos se asignan a los Servicios de Inteligencia, que desde esta legislatura están encuadrados en el Ministerio de la Presidencia que encabeza la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y que contarán en 2016 con un total de 19,8 millones de euros para gastos reservados. Esta cantidad se mantiene invariable desde 2013, cuando se produjo un incremento del 11 por ciento con relación al año anterior, cuando la cantidad se fijaba en 17,8 millones.
La economía española protagoniza un nuevo milagro económico, según el Ejecutivo. El crecimiento será “el mayor de las principales economías desarrolladas” (sic), se crearán 600.000 empleos en este año 2015 y el país se financia a tipos mínimos. Sin embargo, las cuentas públicas para 2016 seguirán siendo “austeras”, según ha reconocido el responsable de su diseño, Cristóbal Montoro. Los millonarios ahorros en paro y en servicio de la deuda se destinarán a intentar cumplir los objetivos de déficit público de Bruselas y apenas se notarán en las partidas de gasto que mejor se traducen en el Estado del Bienestar.
De los alrededor de 8.000 millones que pretende ahorrar el Estado en 2016, poco o nada se traducirá en becas, prestaciones u otro tipo de políticas a los más desfavorecidos. Hacienda insiste una y otra vez que el grueso va al gasto social, porque en esta partida incluye a las pensiones. Sin embargo, las pensiones apenas subirán un 0,25% (el mínimo legal marcado por el factor de sostenibilidad), pero el gasto sube un 2,4%, debido a que cada vez hay más pensionistas con mejores prestaciones derivadas de la que entran jubilados al sistema con mejores prestaciones.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha remarcado este martes que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2016, presentados este martes en Madrid, “solo tienen los objetivos de continuar en la senda de recuperación económica que vive España, continuar creciendo y creando empleo”.
En declaraciones a los periodistas en La Palma del Condado (Huelva), localidad que ha visitado en la mañana de este martes mientras se encuentra unos días de descanso en el Parque Nacional de Doñana, ha recordado que “España ha vivido una etapa muy difícil para muchos españoles”.
No obstante, ha indicado que “el hecho de que españoles empiecen a encontrar puestos de trabajo, sin duda es un dato que demuestra una esperanza de cara al futuro para todos aquellos que aún no han visto la recuperación en ellos mismos”.
Todos los grupos de la oposición han rechazado de plano los Presupuestos Generales del Estado para 2016 que ha presentado este martes en el Congreso el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Los portavoces del PSOE, la Izquierda Plural, UPyD, CiU y PNV no han dudado en calificarlos de “ electoralistas”, “antisociales” y “tramposos” y han anunciado que presentarán enmiendas a la totalidad.
El hecho de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haya decidido este año aprobar de forma exprés los Presupuesto Generales y en agosto sin saber siquiera quien va a gestionarlos tras las elecciones generales, ha sido una de las principales críticas en la que han coincidido todos los portavoces de los grupos parlamentarios.
La partida de la reestructuración de la minería se dota con 377 millones de euros, lo que representa una bajada del 3,7% respecto a la aportación del año pasado, que ascendió a 391,49 millones de euros. En esta partida se encuentran las actuaciones que se llevan a cabo dentro del Marco de Actuación para la Minería del Carbón y las Comarcas Mineras en el periodo 2013-2018.
Dentro de este plan se encuentra el cierre de las unidades de producción no competitivas y se contemplan las ayudas laborales, mediante bajas y prejubilaciones.
Los presupuestos generales muestran un ligero aumento de la inversión en ciencia. Los fondos totales destinados al programa de I+D serán de 6.425 millones de euros, un 0,4% más que el año pasado. Esta tímida subida no permite recuperar los niveles de inversión alcanzados en el año 2010, ya que durante la actual legislatura la inversión global en ciencia se ha reducido en un 13%.
Pese a la subida de los presupuestos destinados a investigación civil, algunas partidas se han mantenido congeladas o se han visto ligeramente reducidas. La inversión en investigación sanitaria ha caído un 0,6% con respecto a 2015, mientras que los fondos destinados a becas de investigación se mantienen congelados.
Los presupuestos para 2016 recogen un estancamiento del gasto destinado a la red básica de servicios sociales (comedores sociales, albergues, pisos tutelados o centros de acogida), que se dota mediante la financiación conjunta del Estado y las Comunidades Autónomas. La asignación se mantiene en los 31,83 millones de euros que se dirigieron a esta partida el ejercicio pasado. Entonces, la cantidad ya permaneció prácticamente invariable con respecto a 2014, cuando se destinaron 32,01 millones de euros. En 2011 el gasto ascendía a 85,7 millones de euros
La congelación se mantiene a pesar de que, según la última Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) hecha pública por el Instituto Nacional de Estadística, en 2014 la población en riesgo de pobreza creció por quinto año consecutivo y alcanza ya al 29,2% de los hogares. Se trata de una de las subidas interanuales más fueres producidas durante la crisis. Además, el porcentaje de población por debajo del umbral del riesgo de pobreza se sitúa en el 22,2%, casi dos puntos más que en 2013.
El Instituto de Salud Carlos III es el centro de referencia de investigación biomédica en España. Es el centro encargado por ejemplo de realizar los análisis de posibles infectados de ébola. En los presupuestos de 2015 le quitaron 13 millones euros y en los de 2016 no solo no los recupera sino que pierde casi 1 millón más. El ISCIII se queda en 272 millones. Es un recorte del 0,6%, no es mucho, pero lleva viendo reducciones desde hace años.
El presupuesto destinado a Parques Nacionales —hay 15, entre ellos Doñana, Sierra Nevada o las islas Cíe— ha caído un 8,2%. Si en 2015 se le asignaron más de 46 millones, para el próximo año serán 42,9 millones.
Renfe consigue beneficios el año que viene por primera vez desde la crisis y Adif dispara sus pérdidas. Esta es la primera conclusión que puede extraerse de la presentación de los Presupuestos Generales para 2016 con relación a Renfe Operadora y Adif antes de que sus cuentas sean desglosadas por la ministra Ana Pastor este martes a mediodía.
Adif Alta Velocidad recibe 3.687 millones de euros, una cuantía muy parecida a la de 2015 (3.626 millones). Las elecciones llegarán dentro de unos meses pero antes está previsto que el AVE llegue a lugares como Zamora, Orense, Burgos, Palencia, León o Murcia: la gran mayoría son capitales de provincia en las que cualquier rentabilidad de la alta velocidad está completamente descartada. La inversión total en ferrocarriles alcanzará los 4.318 millones, por lo que es evidente que el tren rápido vuelve a comerse el grueso del dinero dedicado a infraestructuras.
La partida destinada a la corporación RTVE, el ente público de comunicación aumenta tras tres años congelada. La corporación recibirá un total de 331,55 millones de euros, 50 más que en el ejercicio anterior. Esto supone un incremento del 17,8% respecto a los tres últimos años, en los que se estancó en los 281,41 millones.