Lisboa, 25 dic (EFE).- El primer ministro de Portugal, Luís Montenegro, afirmó este miércoles en su primer discurso navideño que su Gobierno va a realizar la mayor inversión en vivienda pública desde los años noventa del siglo pasado.
Además, “vamos a incentivar la construcción para la venta y arrendamiento de casas por valores moderados”, dijo Montenegro en su alocución televisada.
Como es tradición, el primer ministro pronunció un discurso el Día de Navidad y, este año, Montenegro se ha estrenado tras ganar las elecciones de marzo pasado.
De hecho, comenzó mencionando que este 2024 “fue un año de viraje y de cambio, el nuevo Gobierno ha traído nuevas prioridades y nuevas opciones”.
“No vinimos para mirar o criticar el pasado, vinimos a cuidar del presente y construir un futuro”, indicó.
Sobre ese futuro, aseguró que su equipo va a continuar reforzando los servicios de salud y garantizando una escuela pública de calidad.
Asimismo, “vamos a promover una migración regulada para acoger con dignidad y humanismo a aquellos que escojan vivir y trabajar en nuestro país”, siguió el político, quien también prometió luchar contra la delincuencia económica, la criminalidad violenta y el tráfico de droga.
“Somos uno de los países más seguros del mundo -afirmó-, pero tenemos que salvaguardar ese activo para no perderlo”.
Montenegro ha sido blanco de críticas en los últimos días tras una polémica redada policial en una zona con una importante población migrante de Lisboa, que dejó imágenes de decenas de hombres no blancos con los brazos sobre la pared mientras eran registrados por la policía: la operación se saldó con dos portugueses detenidos.
En el plano económico, el primer ministro aseguró en su discurso que solo creando más riqueza se podrá salvar el Estado social.
Durante su intervención, Montenegro hizo también un repaso de algunas de las decisiones tomadas por su Gabinete en los últimos meses.
Recordó que han hecho rebajas fiscales sobre el trabajo y las pensiones y que han aprobado “el primer presupuesto del que hay memoria que no aumenta ni un solo impuesto”.
En ese aspecto, Montenegro hizo ilusión a las medidas “de impacto” adoptadas para que los jóvenes se queden y trabajen en Portugal.
Por otro lado, señaló que su Gobierno ha acordado con los interlocutores sociales un incremento del salario mínimo nacional, así como una valorización de los sueldos de los empleados públicos y una actualización de las pensiones.
“Queremos premiar el trabajo para estimular la productividad y la economía del país y garantizar más justicia social”, remarcó el primer ministro.
Subrayó que en un mundo “en convulsión” con guerras militares y comerciales, y una Europa “aprensiva” con el estancamiento de Alemania y el déficit y endeudamiento de Francia, “Portugal es un referente de estabilidad y un país de oportunidades”.