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Un grupo de mujeres hará una compra colectiva de tampones a Canadá para presionar por un IVA súperreducido

¿Y si hacemos un pedido de tampones a Canadá? La pregunta se la hicieron un grupo de mujeres dedicadas a la publicidad después de leer que el año pasado el país norteamericano había eliminado el IVA de los productos de higiene femenina. La reivindicación ha llegado a España: “Queremos presionar a los candidatos para que se comprometan a bajar el IVA a estos artículos. Están gravando algo que es involuntario, las mujeres no podemos elegir tener la regla o no”, explica Auxi Barea, del equipo de Tampons From Canada. Si el próximo Gobierno no aplica el IVA super reducido del 4% a los productos de higiene femenina, Tampons From Canadá hará un pedido colectivo de tampones al que ya hay apuntadas cerca de 600 mujeres.

Una caja de tampones supera con facilidad los cuatro euros en cualquier supermercado español y pueden llegar incluso a los seis euros. Al precio del producto hay que sumarle el 10% de IVA reducido con el que están gravados los productos de higiene femenina. Un estudio de la asociación de consumidores Facua mostró que el precio de estos artículos puede variar según donde se compren hasta en un 400% en el caso de las compresas y hasta un 185% en el caso de los tampones. En Canadá, dicen desde la iniciativa, una caja puede costar algo más de tres euros.

“Nos están gravando la regla”, resumen desde Tampons from Canada. Auxi Barea señala que los impuestos son necesarios, pero que en el caso de los tampones es injusto que el IVA sea del 10% y no del 4%, como sucede con aquellos productos considerados de primera necesidad. “No puede ser que el Gobierno saque dinero de algo que no depende de ti. Recaudan dinero público con esto pero las mujeres no podemos controlar ni decidir si tenemos la regla. Para nosotras durante los días que menstruamos esos productos son tan necesarios como el pan”, dice Barea. El pan, como producto de primera necesidad, tiene un IVA del 4%. 

Tampons From Canada ha interpelado en las redes sociales a los candidatos a la presidencia del Gobierno y también a sus equipos. De momento no han tenido respuesta. Su intención es incrementar la presión una vez que haya Ejecutivo, con acciones presenciales incluso. Si no obtienen respuesta a su demanda, activarán el pedido colectivo a Canadá al que ya hay apuntadas seiscientas mujeres. “No es tanto por ahorrar mucho dinero como para reivindicar que no tiene sentido que estos productos no sean considerados de primera necesidad y que nos salgan más baratos allí”, subraya Auxi Barea.

Campañas internacionales

Canadá eliminó el IVA a tampones, compresas, copas menstruales y otros productos de higiene femenina desde el uno de julio de 2015. Después de una intensa campaña independiente, el Gobierno conservador tomó esta decisión con el apoyo de todos los grupos políticos. En Reino Unido o Australia también hay en marcha campañas parecidas, siempre bajo la misma premisa: se trata de productos ineludibles para las mujeres, que les suponen una importante carga económica durante buena parte de su vida.

En Estados Unidos, el debate sobre la menstruación y la economía también ha cobrado fuerza gracias a la presión de activistas y periodistas. Varios estados han dado pasos para eliminar los impuestos a los productos de higiene femenina. Tanto Nueva York como Illinois han aprobado leyes que aguardan la firma definitiva de sus gobernadores. Mientras, la ciudad de Nueva York ha tomado otra decisión de calado: escuelas y centros públicos y sociales tendrán que ofrecer gratis estos artículos para garantizar su acceso a las mujeres de clases más desfavorecidas, una decisión que se ha calificado de histórica.