Los trabajadores de Ryanair denuncian que la empresa les obliga a estar de guardia en sus bases bajo amenaza de despido

La estrategia de Ryanair para impedir la huelga de su personal de cabina durante los días 25 y 26 de julio es la de obligar a estar de guardia en sus bases a los que no tienen servicios mínimos. Es lo que denuncia el sindicato USO, que asegura que la aerolínea empezó a enviar estas comunicaciones a sus empleados en medio de la negociación con los sindicatos en la tarde de este martes. Y lo hicieron bajo la amenaza de consecuencias laborales si no acudían a sus puestos.

Según las fuentes consultadas por eldiario.es, Ryanair envió emails a sus empleados en los que les instaba a estar disponibles en servicio “de imaginaria”, que es una guardia al uso. Esta medida suele tener carácter preventivo para paliar posibles imprevistos. Pero, en este caso, se ha llamado a todos los empleados a hacerlo. “La intención es reventarnos la huelga”, dice otro de los sindicalistas presentes en Barajas.

En el email enviado a los trabajadores, la empresa esgrime las “obligaciones contractuales” para exigirles su presencia en las centrales. Algo que colisiona con el derecho de sus empleados a hacer huelga, aseguran fuentes sindicales.

“Mandar este email mientras estamos negociando dice mucho de su voluntad de llegar a un acuerdo”, dice una de las representantes de los trabajadores consultadas. Desde el sindicato USO denuncian que en aeropuertos como el de Palma hay hasta 20 trabajadores en “imaginaria” cuando sólo hay un sofá de tres plazas para sentarse.

Pero estas “coacciones” denunciadas por los trabajadores comenzaron semanas atrás. En otro email enviado a los empleados, Ryanair les preguntó si iban a hacer huelga o irían a sus puestos los días 25 y 26 de julio. Para ello, les daba tres opciones para que desvelasen si se sumarían a los paros o no. Algo que es ilegal, ya que no se puede preguntar previamente si un empleado va a hacer huelga. En la tercera opción a la pregunta, la compañía daba la opción de presentarse voluntario para sustituir a los que acudieran a su puesto por los paros.

“Fue una amenaza clara de aplicar el régimen disciplinario a quien no estaba sujeto a los servicios mínimos. Vamos a ir por la vía penal porque es ilegal”, asegura a eldiario.es Monique Duthiers, ex presidenta del Sitpla, desde Berlín. Esta sindicalista también denuncia que Ryanair ha enviado supervisores desde la capital irlandesa para controlar e identificar quién se sumaba a los paros.