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“La hostelería es un trabajo muy duro, pero dentro de esa dureza tratamos de que sea decente”

Gonzalo Fuentes es presidente del comité de empresa del hotel AC Hotel Málaga Palacio, donde ha trabajado como camarero desde hace cuarenta años. Fuentes es también responsable de relaciones institucionales de la Federación de Servicios de CCOO y ha impulsado la campaña por los derechos de las camareras de piso, una situación que califica de “indecente e inmoral”. Hablamos con él tras las declaraciones del fundador de AC Hoteles en se mostraba muy crítico con las condiciones laborales de otros hoteles.

¿Cómo funciona el hotel AC Hotel Málaga Palacio?¿Las condiciones laborales son coherentes con las palabras de Antonio Catalán?

Sí, nosotros hemos demostrado a Antonio Catalán que es posible tener buenas condiciones económicas, cumplir el convenio colectivo sectorial provincial y ser rentable. Tenemos media hora para almorzar. Las camareras de piso no están externalizadas y la media de habitaciones diarias que se limpian es de quince frente a las veinte o veinticinco de otros hoteles. Hay compañeros que ayudan a las camareras a subir y bajar ropa sucia y eso en otros hoteles ha desaparecido. Las camareras de piso tienen un fin de semana de descanso al mes y procuramos que se cojan veinte días de vacaciones en verano.

La hostelería es un trabajo muy duro de 24 horas y 365 días al año, pero dentro de esa dureza tratamos de que sea un trabajo decente. Una camarera de piso cobra lo que marca el convenio, entre 1.050 y 1.100 euros netos con dos pagas extra. Ahora también tenemos un comité de salud laboral para mejorar las condiciones porque es un trabajo muy monótono donde hay que levantar colchones y hacer ciertos movimientos. 

¿Es muy diferente de lo que sucede en otros sitios?

Es la noche y el día. Nuestras compañeras se ganan su sueldo, nadie les regala nada. En otros sitios se está externalizando el servicio producto de la reforma laboral. Antes de la reforma todo el mundo tenía que cobrar en función del convenio sectorial, ahora la norma prima los convenios de empresa. En la práctica supone que empresas multiservicios y ETT hacen convenios ad hoc de empresa en los que rebajan los salarios hasta un 40%, lo que implica reducir los salarios a 650 euros, implica no tener dos días de descanso, no tener media hora de comida dentro de tu jornada, implica que descansas cuando puedes y que no tienes planificados ni tus turnos, ni puedes conciliar. En muchos casos le dan de alta cuatro horas y trabajan seis u ocho. Muchas personas no llegan a final de mes, es indecente e inmoral. 

¿Está ganando dinero vuestro sector?

Estamos en un contexto de ganancias. El precio medio de la habitación de hotel ha crecido un 11%. Vamos a batir récords en rentabilidad de las empresas, en pernoctaciones, en ocupaciones, en ingresos por turismo... Y mientras se rebaja a la gente un 40% sus salarios.

Entonces, ¿el modelo de AC Hoteles demuestra que es posible hacer las cosas de otra forma y con unas condiciones laborales dignas?

Claro, lo que pasa es que en general el empresario tiene una visión de cortoplazo. Un empresario que paga 300 euros gana más que un empresario que paga 1.000 euros. Eso es innegable. Pero se puede ganar dinero. Es posible ser rentable y competitivo y no a costa del sacrificio de los trabajadores.

En vuestro caso, casi todos los contratos son fijos

Sí, el 95% de los trabajadores somos fijos, la gran mayoria a tiempo completo y el resto con jornadas de seis horas, que también hay gente que la pide. Cuando el contrato parcial es pedido por los trabajadores eso está bien. Con el contrato parcial se pueden ganar entre 700 y 800 euros y hay personas a las que les viene bien también tener seis horas de trabajo. El problema es que con la reforma laboral del PP, donde se reguló el despido parcial, se está creando empleo de dos horas, tres horas... y se está destruyendo empleo de ocho horas.