Fin al conflicto de las trabajadoras de limpieza subcontratadas de Osakidetza. Las empresas y los sindicatos LAB, CCOO, UGT y ESK han firmado un preacuerdo que sienta las bases del nuevo convenio y que homologa las condiciones de estas trabajadoras con las que tienen las que están contratadas directamente por el Servicio Vasco de Salud. Esto incluye también el pago de los atrasos correspondientes a la carrera profesional de estas trabajadoras, aunque en la negociación han tenido que ceder parte de estos años y se reconocen solo desde el 2021. Este es precisamente el motivo por el que sindicato ELA no ha firmado el preacuerdo, al considerar que se aceptan los recortes y que se perpetúan las peores condiciones para estas trabajadoras respecto a las de Osakidetza.
El preacuerdo, que ahora tiene un plazo máximo de dos meses para ratificarse con la firma de un convenio, se ha conseguido después de una larga reunión en la sede del Gobierno vasco en Bilbao. Tres horas han necesitado las partes para plasmar en un papel lo que parecía que estaba ya claro en el acta del preacuerdo que firmaron los sindicatos y las empresas la última semana de junio. Pero lo cierto es que a la reunión de este miércoles se ha llegado sin que las empresas tuvieran del todo claro el compromiso del Departamento de Salud para financiar el coste de esta homologación a través de los convenios de contratación que se suscriban con las empresas. Y ello pese a que el Departamento que dirige Gotzone Sagardui emitió el pasado sábado un comunicado el que daba su visto bueno al preacuerdo para poner fin al conflicto que ha supuesto meses de conflicto. “Han hecho falta muchas llamadas a lo largo de la llamada”, señalan fuentes de los asistentes a la reunión. “Por parte de las empresas y también por parte del departamento de Trabajo y Empleo”, señalan.
Los sindicatos, que han destacado que son las trabajadoras las que han conseguido “con su lucha” estas mejoras, no tienen dudas de que el preacuerdo se plasmará en un convenio cuanto antes. No han querido cuantificar cuál será el coste para Osakidetza porque eso “es cosa de las empresas y del Departamento”, dicen. Pero sólo en lo que se refiere al pago de atrasos ascenderá a unos cinco millones de euros. Otra cosa es la actualización de los salarios en función de los niveles adaptados a la carrera profesional homologada con el personal de Osakidetza, ya que “dependerá de la antigüedad de las trabajadoras”. No obstante considera que puede llegar a suponer subidas salariales de entre un 20 y un 30%. En función de categorías o antigüedad habrá trabajadoras que cobren unos 9.000 euros en atrasos, calculan las centrales.
En concreto, el acuerdo recoge el reconocimiento de la carrera profesional desde el 1 de enero de 2023. Pero además se establece que se pagarán los atrasos correspondientes a los años 2021 y 2022. Este es el principal punto de discrepancia de ELA, ya que critican que se haya dejado fuera del acuerdo los otros tres años pendiente de pago (2012, 2019 y 2020). También se recoge la demanda de las trabajadoras de una jubilación parcial a través del contrato de relevo. La legislación establece que el contrato de relevo precisa de un acuerdo entre las partes, pero en el preacuerdo suscrito se establece que la empresa no podrá bloquear esta posibilidad si la trabajadora lo solicita. El acuerdo contempla también ampliar el número de vacantes en los ambulatorios y permisos homologados con los que tienen los trabajadores de limpieza contratados directamente por Osakidetza.