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Edouard Lazarguren, pintor que huyó a Francia durante la Guerra Civil, regresa a su Bilbao natal en forma de exposición

Cuando Edouard Lazarguren tenía 9 años, en el año 1937, su padre fue asesinado mientras luchaba en el Batallón Salsamendi en Durango. Después de aquello, su madre decidió huir de Bilbao a Francia, en un viaje que comenzó rumbo a Santander, pasando por Burdeos hasta finalizar en un pueblo cercano a Gap. Su condición de refugiado, la destrucción de su casa y la separación de su familia lo marcaron para siempre.

“Mi padre nació en Bilbao el 14 de octubre de 1928. Vivió en Bilbao hasta que a raíz de la Guerra Civil tuvo que marcharse. Siempre hablaba de su vida en Bilbao, de su padre y de su muerte en la Guerra. Y era muy difícil para él hablar de todo esto, porque cuando lo hacía se ponía a llorar. Bilbao era su ciudad, era su pueblo y toda la vida hablaba de eso”, explica su hija Sabine Lezarguren, que ha regresado a la capital bilbaína trayendo consigo el arte de su padre en la exposición 'Vuelta' disponible en centro municipal del distrito de Abando hasta el próximo 11 de diciembre.

Lazarguren comenzó a pintar desde muy pequeño y pintó durante más de 50 años, pero nunca logró ganarse la vida con su arte. Se marchó a Montpellier a estudiar Bellas Artes durante un año, donde asistió a clases nocturnas, debido a que de día seguía trabajando. Finalmente se trasladó a Bron en 1957, cerca de Lyon, donde trabajó como pintor de construcción. Allí expuso sus cuadros por primera vez a los 32 años. Sin embargo, sólo empezó a dar rienda suelta a su inspiración, pintando sin parar, cuando regresó a su estudio de arte en Villeneuve-Lès-Maguelone. Sus temas principales eran las mujeres, los niños, los gatos, el arte y la naturaleza.

“Lo más importante, cuando pintaba, eran la luz y el color, eso era su obsesión”, sostiene su hija. A pesar de que se dedicara durante toda su vida a realizar cuadros, nunca logró vivir de la pintura. “Tengo 1.400 pinturas y dibujos y todas eran importantes para él. Sus obras no transmitían ningún mensaje, eran el arte por el arte, creación pura y vital. Y siempre con la angustia de no tener éxito. El comercio de la pintura no era importante para él, para el lo importante era la creación”, detalla tras realizar una visita guiada por las obras de las distintas etapas de su padre.

La naturaleza, la mujer desnuda, los niños y la música son los temas principales de la serie de obras que decorarán el centro municipal de Bilbao. Todo ello con pinturas que expresan alegría, color y luz, pese a la tristeza y el vacío que el pintor sentía, según describe su propia hija. Finalmente Edouard Lazarguren falleció el 11 de julio de 2015. 'Vuelta' es su primera exposición en España.

“Porque se fue de aquí obligado por unas circunstancias tremendas, con esta exposición, desde el Ayuntamiento de Bilbao, queremos poner en valor lo necesario que es conocer nuestra historia. Una historia que pasa, irremediablemente, por pararnos en la Guerra Civil, en su incidencia y en sus consecuencias, siendo una de ellas haber estado privados de disfrutar en casa de un artista inmenso que nació en nuestras calles”, lamenta el concejal de Cultura y Gobernanza, Gonzalo Olabarria, tras inaugurar la exposición que ha traído de vuelta a las calles de Bilbao en forma de arte a Edouard Lazarguren.