Un equipo de fútbol de Santurtzi denuncia a un entrenador por agresión sexual a jugadoras menores de edad

El equipo de fútbol Peña Athletic Santurtzi ha presentado ante la Ertzaintza una denuncia contra uno de sus entrenadores por agresión sexual a varias jugadoras menores de edad, que actualmente tienen entre 15 y 17 años. La denuncia se ha realizado una vez activado el protocolo de protección al menor. El Peña Athletic Santurtzi cuenta con siete equipos femeninos y diez masculinos. Fuentes del Departamento de Seguridad confirman a este periódico la existencia de una denuncia y la apertura de diligencias.

El suceso ha salido a la luz menos de un año después de que las familias de cuatro menores denunciaran ante la Ertzaintza al entrenador de fútbol de sus hijas en el club Pauldarrak del municipio vizcaíno de Barakaldo también por agresiones sexuales a menores de entre 14 y 16 años. En este caso se decretó la libertad provisional del acusado, que fue apartado del club tras una década como parte del cuerpo técnico.

Además de los de los entrenadores de Santurtzi y Barakaldo, el pasado enero se celebró el juicio contra el exseleccionador de baloncesto en categorías inferiores y exentrenador y exdirector deportivo del club Lointek Gernika, Mario López, acusado de un delito “continuado” de agresión sexual a una de sus jugadoras desde que tenía 13 años. Tras el juicio, tanto la Fiscalía como la acusación particular mantuvieron sus peticiones de cárcel. La Fiscalía pide 14 años de prisión y la acusación particular hasta 18 para el exentrenador y exdirector deportivo del club de baloncesto Lointek Gernika Mario López por un delito “continuado” de agresión sexual a una de sus jugadoras desde que tenía 13 años. Además de la pena de 14 años de cárcel, el Ministerio Público solicita para López la inhabilitación absoluta, el abono de las costas, que se le prohíba acercarse durante un periodo de diez años a la localidad vizcaína de Gernika, donde reside la víctima, y a indemnizarla con 20.000 euros. Por su parte, la acusación particular pedirá en el juicio 18 años y nueve meses de prisión por agresión sexual continuada además de una indemnización de 150 000 euros por daño moral y social. El caso ha quedado visto para sentencia.

En octubre la Diputación de Bizkaia presentó 'Kirola On', una herramienta para detectar situaciones de violencia infantil en el deporte escolar. Se trata de un canal confidencial, al que se accede a través de la página www.kirolaon.eus rellenado un cuestionario en el que se debe informar de qué ha pasado, en qué lugar, cuál es el deporte que se practica y en qué club, así como, en el caso de que la persona denunciante quiera, su nombre. Una vez enviado el mensaje recibirá una contestación inmediata sobre el asunto que plantee. En dicha comunicación, un equipo de personas profesionales expertas explicará el proceso a seguir y las posibles implicaciones. Está dirigido principalmente a los menores de edad, pero también pueden hacer uso de 'Kirola On' los entrenadores, las familias u otros menores que hayan sido testigo de alguna situación que quieran hacer pública o tengan dudas sobre un suceso.

“La prevención es fundamental. No debemos llegar a la situación en la que la violencia ya haya ocurrido. Tenemos que dejar claro que esta herramienta sirve también para la consulta, para saber qué se puede hacer, si lo que se ha visto o vivido es normal o no, o para cualquier duda que les surja a los menores”, explicó Rocio Ybarra, experta en “Deporte, Educación y Convivencia” y responsable de Aterpe, el pionero programa de Protección a la Infancia del Athletic Club durante la presentación de la iniciativa. Según detalló la diputada de Cultura, Deporte y Euskara de la Diputación de Bizkaia, Leixuri Arrizabalaga, los propios clubes, ante las situaciones de violencia vividas, fueron los que pidieron una herramienta para saber cómo enfrentarse a ellas. “La relación entre la Diputación, las federaciones o los clubes es diaria. Cada año se hacen reuniones en los que se comparte información. Tenemos claro que esa preocupación y necesidad estaban ahí y que teníamos que dar pasos hacia adelante para erradicar la violencia en el deporte”, reconoció Arrizabalaga.