El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha presentado este martes como “adecuación” la ya tradicional reducción de horarios en los centros de salud y ambulatorios en períodos vacacionales. La temporada navideña, en este caso, se prolongará hasta el 10 de enero y podría iniciarse ya este jueves, aunque hay centros que trabajarán con normalidad hasta Año Nuevo. La norma general es una atención de 8.00 a 17.00 horas, cuando el horario normal es hasta las 20.00. En casos concretos, además, el horario será de 8.00 a 15.00 horas y en otros incluso menor, de 8.00 a 11.00 horas excepcionalmente. Un dato: de 62 consultorios afectados en 2021 se pasa a 90, según los datos facilitados por el Gobierno vasco.
Osakidetza puntualiza que el recorte será analizado día por día. Los datos concretos se facilitarán en los propios centros y en la web, que es osakidetza.euskadi.eus, aunque se ha facilitado una previsión que puede ser consultada al final de esta información. El Departamento de Salud indica que se busca combinar el mantenimiento de la actividad con “el descanso de los profesionales”. Sin embargo, a diferencia de en verano, en esta época del año la reducción no se corresponde precisamente con una menor demanda asistencial. De hecho, el pasado año, cuando los ambulatorios afectados fueron 62, coincidió con la mayor presión asistencial causada por la COVID-19 desde el confinamiento tras la llegada de la variante ómicron del Sars-Cov-2. En privado, se admite que es imposible sustituir todas las vacantes por la escasez de profesionales disponibles.
Indica Osakidetza que “fuera del horario de apertura, la asistencia sanitaria estará garantizada en Osakidetza en los Puntos de Atención Continuada (PAC)”. “Dada la variabilidad de horarios que pueden plantearse en estas próximas fechas -hay que tener en cuenta que habrá centros que adecúen sus horarios durante todas las Navidades, otros sólo en días concretos y otros en ningún caso-, la ciudadanía puede informarse a través de los canales habituales: la web de Osakidetza, paneles y carteles informativos de los propios ambulatorios, y en el caso de las zonas rurales, también en los ayuntamientos”, se explica.
“Se plantean nuevos recortes en atención primaria de cara al periodo navideño, y también en condiciones laborales, como el recorte radical e injustificado que se quiere aplicar en el desarrollo profesional. Estamos ante problemas de todas las categorías de Osakidetza y de los tres territorios”, han manifestado en un comunicado conjunto los principales sindicatos representados en la Sanidad vasca. Y añaden: “A la vista de esta cruda realidad, los sindicatos Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT consideran imprescindible iniciar una dinámica de movilizaciones que agrupe tanto al personal, como a la propia ciudadanía. Como primer paso, convocan concentraciones en todos los centros de trabajo de Osakidetza el próximo jueves día 22 de diciembre, a las 11.00 horas en todos los hospitales y a las 13.00 horas en todos los centros de atención primaria. Pasado el período navideño darán continuidad a las movilizaciones para que el personal y la ciudadanía llenen las calles en favor de la Sanidad pública”.
Entienden que “las palabras pronunciadas en junio por la consejera Gotzone Sagardui aludiendo a una 'nueva cultura' anticipaban las medidas y recortes que se están dando”. “Es urgente impedir que el Departamento de Salud siga desmantelando Osakidetza y precarizando las condiciones laborales de su plantilla”, claman estas centrales. Denuncian que la dirección política de Salud “sigue sin atender ni una sola de las reivindicaciones de la parte socia y pretende, además, utilizar la mesa sectorial para aparentar una negociación que no existe”. Lamentan que el Gobierno haga “caso omiso a las movilizaciones impulsadas antes del verano”, tanto de la plantilla “como de la ciudadanía”. “Estas movilizaciones han sido un buen reflejo de los graves problemas estructurales de Osakidetza, del hartazgo tanto de la plantilla como de la ciudadanía, y de la necesidad de soluciones urgentes”, entienden Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT.
En rueda de prensa, el portavoz del Ejecutivo, Bingen Zupiria, ha admitido que “el sistema sanitario en su conjunto vive una situación de especial tensión”. Desde 2020, “a todas las actividades ordinarias se le añade ahora una nueva circunstancia como consecuencia de las personas afectadas por la COVID-19”. Zupiria ha mencionado la subida de casos que se está registrando -casi un 70% más de ingresados en dos semanas- y que en este final de 2022 hay “cientos de trabajadores de baja, especialmente por enfermedades respiratorias”. En todo caso, ha recalcado que “los trabajadores, médicos, enfermeros y todos, tienen derecho como todos los empleados públicos a disfrutar de las vacaciones que les corresponden”. No ha ocultado las “dificultades” para contratar interinos y ha lamentado que hace una década el Estado redujera plazas MIR, lo que ha reducido ahora el mercado de facultativos.
Los horarios de Navidad en Osakidetza