Si cumple su palabra, la dirección de Podemos deberá activar con carácter inmediato un expediente de expulsión contra cuatro de sus ocho representantes en las Juntas Generales de Álava. Los críticos de la formación han roto la disciplina de voto del partido morado por tercera vez y en la votación definitiva de los presupuestos de la Diputación no han acatado la orden de la secretaría de Organización de abstenerse ante la propuesta del Gobierno foral de PNV y PSE-EE a cambio de lograr introducir enmiendas valoradas en unos dos millones de euros.
Es la consumación de un cisma que se ha venido gestando desde el principio de la legislatura, en el verano de 2015, y que ha acabado por confirmarse en un momento político en el que el papel de Podemos era irrelevante para la aprobación de las cuentas alavesas, ya que la coalición de PNV y PSE-EE había alcanzado un acuerdo global con EH Bildu valorado en unos 2,6 millones de euros. “Podemos está roto, agrietado o descompuesto, no sabemos”, ha dicho uno de los electos como reflejo gráfico de lo ocurrido.
En la votación, José Javier Bizarro, Juan José Celorio, Koldo Martín y Daniel Trujillano han apretado el botón del ‘no’ en conciencia, según ellos, con su ‘no es no’ a la derecha, en este caso al PNV, y en el mismo sentido con el único procurador de IU y la bancada del PP, aunque con argumentos opuestos. Uno de ellos, Trujillano, se ha “felicitado” ante los medios de haber mantenido el desafío hasta el final incluso ante “descalificaciones personales”: “Asumíamos las consecuencias”. La octava en discordia en Podemos, Mari Cruz Polaina, se halla de baja, aunque recientemente firmó un manifiesto apoyando la actuación política de los críticos.
“El partido no va a hacer dejación de sus funciones”
Mientras, Arantxa Abecia, Itxaso Roldán y Asela Ortiz de Murua han acatado el acuerdo de Podemos y defendido por enésima vez una visión pragmática de la política aunque aseguran no compartir el conjunto del presupuesto. Abecia, sin cargo orgánico en Podemos, ha rubricado a los periodistas que tras lo ocurrido “el partido no va a hacer dejación de sus funciones”. Tras estas contundentes palabras, y conminada por una asesora, no ha querido ofrecer más explicaciones públicas.
Antes, en el debate plenario, quien ha tomado la palabra en nombre de todo el grupo ha sido Abecia. “Hemos venido a estas Juntas Generales para que las cosas cambian. Después de escalar una gran colina, uno se encuentra que hay muchas más colinas que escalar. Por encima de los intereses partidistas, hay que mirar siempre a los intereses de quienes peor lo están pasando. Como alavesa y parte de Podemos, es mi mayor deseo contribuir al desarrollo de este territorio y de sus gentes. Hemos tratado de un introducir modificaciones para ir dándole la vuelta a unos presupuestos a todas luces insuficientes”, ha argumentado la portavoz oficialista de Podemos.
También ha hablado en Onda Vasca el 'número dos' de Podemos en Euskadi, Eduardo Maura. La mano derecha de Nagua Alba ha recalcado que el problema de Álava no se circunscribe a la negociación presupuestaria porque el sector crítico es un grupo “conflictivo” que ha generado problemas de índole personal en el día a día de las Juntas Generales.
En medio del fuego cruzado, el juntero del grupo Irabazi (IU-Equo), José Damián García Moreno, ha apelado a Manuel Azaña en 1938, cuando trató de detener la Guerra Civil, y ha solicitado “paz, piedad y perdón” entre los dos bandos enfrentados en la formación morada.
Debate bronco con el PP
La polémica interna en Podemos ha eclipsado totalmente el debate presupuestario, salvado con tranquilidad por la coalición de PNV y PSE-EE luego del pacto político con EH Bildu por segundo año consecutivo. Álava cuenta ya con un presupuesto de 473 millones de cara a 2017, un 8% que el año pasado, y que incluye propuestas de EH Bildu (unos 2,6 millones de euros), de Podemos y también dos pequeñas enmiendas planteadas por el ex de Ciudadanos y ahora independiente Miguel Ángel Carrera.
Ramiro González, el diputado general, se ha felicitado por el “acuerdo transversal” con “casi todas las sensibilidades importantes del territorio salvo el PP”. González, que en su día auguró el presupuesto con menor rechazo aunque al final el PP y parte de Podemos se han ido al ‘no’ junto a IU, no ve precipitadas aquellas reflexiones porque tiene “un apoyo muy amplio” y que incluye a “fuerzas de ámbito nacional y abertzales”.
El dirigente alavés ha lamentado el papel del PP, que cree que se ha posicionado en contra sólo por no regalarle la fotografía de contar con un presupuesto con poco rechazo. Ha lamentado que Javier de Andrés se haya quedado en cuestiones de poco valor económico como las partidas de memoria histórica y que haya virado al ‘no’ con “muy poca crítica de contenido real”.
En efecto, De Andrés ha realizado en su discurso duras críticas a cuestiones simbólicas incorporadas por PNV, PSE-EE y EH Bildu al presupuesto como 30.000 euros para un documental dedicado al lehendakari José Antonio Aguirre (que no lo fue de Álava porque estaba ya conquistada por Francisco Franco) y las partidas para “memoria histórica y víctimas de derechos humanos” que no citan expresamente a los asesinados por ETA.