Una exposición en Bilbao pone rostro a los deportistas paralímpicos vascos que “inspiran” con sus logros en París en 2024

En los Juegos Paralímpicos de París de 2024, que se celebraron entre finales de agosto y comienzos de septiembre, participaron 4.463 deportistas. Trece de ellos, de los deportes y modalidades más variados, eran vascos. Baloncesto, piragüismo, tiro... Y cada uno de ellos tiene su propia historia. Los años de formación, los meses previos de preparación ya con la cita olímpica en el calendario y el rendimiento en cada prueba concreta son teselas que conforman un mosaico personal e intransferible.

Ahora, la exposición 'Kirolariak' (que puede traducirse del euskera al castellano como 'deportistas'), presentada por el Museo del Nacionalismo Vasco, ahonda en cada una de esas historias. Las fotografías, que han corrido a cargo de Paulino Oribe, van acompañadas de un texto confeccionado por diversos periodistas, entre los que se cuenta Iker Rioja Andueza, de elDiario.es/Euskadi. “Cada historia refleja el coraje, la lucha y la pasión por el deporte que estos atletas han mostrado, transformando sus desafíos personales en logros deportivos que inspiran a todos y todas”, se explica desde la organización. La muestra puede visitarse en Sabin Etxea, en la calle de Ibáñez de Bilbao, número 16, desde ya y hasta el 30 de abril.

Los deportistas retratados en la exposición son, en orden alfabético, Amagoia Arrieta (boccia), Ander Cepas (tenis de mesa), Agurtzane Egiluz (baloncesto), Mikel Erdozain (natación), Asier García (baloncesto), Iñigo Llopis (natación), Rakel Mateo (triatlón), Fernando Michelena (tiro), Higinio Rivero (piragüismo), Iker Sastre (tenis de mesa), Naiara Rodríguez (baloncesto), Laura Ugarte (baloncesto) y Nahia Zudaire (natación). Se puede leer más información sobre cada uno de ellos en la previa que elDiario.es/Euskadi preparó antes de la cita paralímpica.

“El esfuerzo que han invertido para llegar hasta donde están, su incansable dedicación y su amor por el deporte son el motor de esta exposición”, se explica en un texto introductorio firmado por Mireia Zarate, presidenta de la Fundación Sabino Arana. Recalca que es “fundamental poner rostro a estos y estas deportistas, haciendo que su historia llegue de manera directo al público”. “'Kirolariak' es una invitación a descubrir y reconocer a estos y estas atletas vascos que, con valentía y esfuerzo, han logrado conquistar el escenario paralímpico”, apostilla.

“Se olvida que existen”

Paulino Oribe y su cámara son unos habituales de los Juegos Paralímpicos desde que se estrenase en los de Pekín en 2008, hace ya diecisiete años. Fue a aquella cita con la idea de confeccionar un libro y después no ha faltado a las citas de Londres en 2012, Río de Janeiro en 2016, Tokio en 2021 (aunque fueran los de 2020) y París en 2024. Son sus fotografías, sus retratos de los protagonistas vascos de 2024, las que ilustran la sala de esta exposición.

Es consciente de que trabajar en unos Juegos Paralímpicos no es algo “baladí”, porque no cualquiera tiene la oportunidad. “Te aporta una enseñanza, una manera de trabajar diferente”, subraya. A él cada una de las ediciones le ha servido para escapar de la rutina diaria de la fotografía para prensa. “En un año olímpico y paralímpico, es una oportunidad de dar un poquito de visibilidad a los deportistas paralímpicos, que son aquellos de los que la gente generalmente se olvida un poco que existen”, señala. “Las personas que se retratan en unos Juegos Paralímpicos son muy cercanas, se puede hablar con ellas y hay buen rollo. Aportan una enseñanza muy grande y ayudan a ver lo que hay”, abunda Oribe, que considera también que experiencias como estas ayudan también a quitar cualquier resquicio de prejuicios que pudiera haber. El próximo lunes, algunos de los deportistas retratados en las fotografías se acercarán a la exposición para compartir sus experiencias.