¿Qué es el periodismo de datos?
Por lo general se podría pensar que periodismo de datos es el periodismo que se hace con datos. Pero hay que tener en cuenta que los datos que los periodistas manejaban hace 20 años no son lo que se manejan ahora. Antes, cualquier colección de cifras reunidas en una tabla podía servir, pero hoy en día vivimos en un mundo digital en el que tenemos acceso a una gran cantidad de cifras y en el que casi cualquier cosa puede ser descrita con números. Seguramente, la única diferencia con el periodismo tradicional son las nuevas posibilidades que se presentan, cuando se combina la forma de narrar una historia de toda la vida, con el alcance de la información digital disponible en la actualidad. En realidad, el periodismo de datos difiere del periodismo escrito solo en que se usa un equipo diferente. Hace un tiempo se descubrían cosas hablando con gente en bares, y puede ser que esto siga sucediendo, pero ahora también se trata de analizar datos, equiparse con herramientas y encontrar lo que es interesante.
Sin embargo, el profesor de Infografías y Visualización en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Miami, Alberto Cairo, cree que el gran problema al que se enfrentan es la enorme cantidad de datos accesibles hoy en día y el desafío general es que “los periodistas no estamos preparados para lidiar con esos datos”. Los periodistas se encuentran muchas veces con el problema de no saber cómo procesar, cómo analizar o cómo extraer historias “incluso de bancos de datos pequeños con unos pocos cientos de columnas o de líneas”. Cairo considera que esto, hoy en día, “es fundamental” porque los datos, como cualquier otro tipo de fuente, hay que saber cómo interrogarlos, explorarlos y cómo extraer cosas útiles de ellos. A su juicio, los periodistas “estamos viviendo en un mundo que nos está superando, nos está adelantando por la derecha y por la izquierda”, lo que es un enorme problema.
Asimismo, este experto en periodismo de datos explica que hoy en día muchas redacciones, sobre todo en EEUU, han cambiado los perfiles de las personas que trabajan en ellas. Así, apunta que es una combinación de personas, ya no solo periodistas. Por una parte, se siguen necesitando periodistas con formación de periodismo tradicional, es decir, aquellos que saben bien cómo buscar historias, cómo escribir un buen titular, que saben interrogar fuentes, personas, y que saben buscar información. Ese es un perfil que es imprescindible siempre. Pero luego lógicamente se buscan también perfiles técnicos de gente que tenga algún tipo de conocimiento en ‘Data Science’, cómo manejar bases de datos o cómo extraer significado de esos números. Pero tienen que tener también un cierto ojo periodístico, es decir, “no puedes contratar simplemente a una persona que sea un grandísimo programador, sino que ese programador tiene que tener un poco la vocación de servicio público que cualquier periodista tendría que tener”.
Este tipo de personas existen en las redacciones de medios como Propublica, que tienen una sección que ellos llaman ‘News Application’, que es básicamente la sección de datos, de visualización y de infografía. Hay tres o cuatro personas que son programadores puros, pero que no se llaman a sí mismos programadores, se llaman periodistas. “Son periodistas que usan técnicas que no son muy tradicionales en el periodismo”, explica Cairo. Y finalmente diseñadores, ya que una parte importante del periodismo de datos es la visualización de los mismos. Esta parte se basa en técnicas heredadas de la infografía periodística tradicional, de la visualización estadística y la visualización cartográfica. En este sentido, cree que se necesitan diseñadores que están interesados no solo en dibujar y en explicar cosas visualmente, sino también en informarse un poco en lo mucho que se ha aprendido en los últimos 20 años sobre cómo presentar datos cuantitativos por medio de gráficas estadísticas y por medio de mapas.
Facultades de periodismo
Este profesor de la Universidad de Miami considera que, en general, las facultades no están preparadas para este reto. Explica que en Miami, por ejemplo, en los últimos dos años han progresado mucho en estos ámbitos, creando nuevas especializaciones en periodismo de datos, en visualización, creando nuevas clases relacionadas con programación, desarrollo, gestión de bases de datos, pero todo desde un punto de vista periodístico. Y luego también haciendo que los estudiantes que están interesados en enfocarse en esto puedan tomar clases en departamentos relacionados. Es decir, los estudiantes no solamente reciben clases en la facultad de periodismo, sino que van a la de negocios o de empresariales y cogen ahí una clase de estadística, o se van al departamento de geografía y toman una clase sobre mapas de datos. La cuestión es explorar esas posibilidades de relaciones multidisciplinares.
Por otro lado, cree que en España falta mucho por hacer. Considera que el país sigue anclado en un modelo de enseñanza del periodismo que pertenece a los años 70-80, lo que “no quiere decir que las actividades o las habilidades tradicionales del reportero deban ser olvidadas”. Asegura que eso que aprendió en la facultad hace 20 años “sigue teniendo vigencia”, cómo buscar una historia, cómo escribir un titular, cómo entrevistar a una fuente, pero “no en detrimento de la parte más técnica”. Porque muchas veces se piensa, que “profesores como yo, enseñamos habilidades, pero también enseñamos cómo hacer periodismo”. Lo que pasa que, en vez de usar herramientas como el papel y el lápiz, se enseña a cómo reportear noticias a través de todo este tipo de tecnologías. “Y este cambio de mentalidad yo creo que es el punto fundamental que falta en las facultades”, asegura. Considera que “hay que abandonar un poco toda esa visión anquilosada, prehistórica del periodismo como algo contrario al avance tecnológico y aprovecharlo para mejorar nuestras habilidades periodísticas”.
Futuro del periodismo
El periodismo de datos no es el único futuro; es solamente uno de los múltiples posibles. Es decir, habrá medios que se dediquen única y exclusivamente al periodismo de datos, y el ejemplo es FiveThirtyEight. Sin embargo, en otro tipo de empresas este tipo de técnicas serán simplemente como es la infografía o es la visualización, un elemento más de un conjunto de habilidades, otra forma de contar historias. Las técnicas relacionadas con el periodismo de datos, el reunir, procesarlos, filtrarlos, organizarlos, interpretarlos lógicamente y luego presentarlos al público es solamente una de las múltiples ramas en las que se divide hoy en día el periodismo. Y Cairo cree que “tenemos que invertir en ella, porque es un camino de futuro, pero no es el único”.
Dicho esto, cree que a cualquier periodista le conviene aprender un poco de este tipo de técnicas. Porque los profesionales se enfrentan a tablas de Excel prácticamente todos los días. O sea, independientemente del tipo de periodismo que uno haga, cualquier reportero va a tener que enfrentarse a números constantemente. Por ello, considera muy necesario, para evitar errores graves, que cualquier periodista aprenda o, por lo menos, se eduque en los elementos fundacionales del análisis de datos. A su juicio, “no debemos dejar que este tipo de técnicas sean el dominio exclusivo de un grupo pequeño de periodistas dentro de las redacciones”.